Hay que cuidar la vida
Desde este martes, el huracán Beryl se hará sentir con fuerza sobre todo el litoral sur del país, con lluvias y vientos propios de una tormenta tropical.
Ante la inminente llegada de este fenómeno, hacemos un llamado urgente y sincero a todos los dominicanos para que tomen las debidas precauciones y cuiden sus vidas.
Este fenómeno natural no debe ser subestimado; su paso por las Antillas ha traído lluvias intensas y vientos fuertes que pueden poner en peligro nuestras vidas y propiedades.
Es esencial que actuemos con responsabilidad y previsión, atendiendo siempre los boletines meteorológicos oficiales y las instrucciones de las autoridades.
Hay que asegurar los hogares, disponer de elementos esenciales mientras dure el paso del fenómeno y evitar salir a las calles, a menos que sea por alguna emergencia.
No es la primera vez que enfrentamos la furia de un huracán, y sabemos que la preparación y la prevención marcan la diferencia entre la vida y la muerte.
Las imágenes devastadoras de desastres pasados deben servirnos de recordatorio y motivación para actuar con determinación y responsabilidad.
Los dominicanos somos fuertes y resilientes, pero no debemos confiar solo en nuestra fortaleza.
La naturaleza es poderosa e impredecible, y debemos darle el respeto que merece.
Cada vida es valiosa, cada precaución tomada es una vida potencialmente salvada.
Este llamado no es solo una advertencia; es un ruego desde el corazón.
Pidamos a Dios protección, pero también pongamos de nuestra parte para cuidar de nosotros mismos y de nuestros seres queridos.
Hay que cuidar la vida. Que nuestra prudencia y preparación sean la mejor respuesta a esta amenaza.