AGENDA SOCIAL

Coincidencias del liderazgo femenino

A pesar de provenir de contextos y países diferentes, ambas líderes tienen varias similitudes notables en sus trayectorias profesionales y políticas. Ambas ostentan una formación académica sólida en ciencias; una es doctora en Ingeniería Energética y Física, y la otra es doctora en Física. Esta formación científica influyó en su enfoque metódico y analítico para abordar las funciones públicas, permitiéndoles construir políticas públicas de calidad.

Ambas han sido reconocidas por su pragmatismo y su enfoque basado en evidencias, utilizando su formación científica para tomar decisiones informadas y efectivas, priorizando los resultados tangibles.

Además, ambas han sido fervientes defensoras de las políticas ambientales, implementando medidas para mejorar la calidad del aire, promover la movilidad sustentable, lograr la transición hacia la energía renovable y reducir las emisiones de carbono.

Una de ellas se ha enfocado en fortalecer el Estado de bienestar mediante políticas de justicia social, mientras que la otra promete una agenda que aborde las desigualdades sociales y mejore las condiciones de vida de los más vulnerables, especialmente madres solteras, ancianos y desempleados.

Una fue la primera mujer en ocupar el cargo de Canciller en Alemania, el puesto político de mayor envergadura en ese país. La otra acaba de convertirse en la primera mujer Presidenta de México y de un país de Norteamérica. Una es Ángela Merkel, la otra es Claudia Sheinbaum.

La victoria de Claudia Sheinbaum representa un cambio más amplio hacia la igualdad de género en la política latinoamericana y la primacía del rigor científico en la solución de problemas públicos, similar a lo que sucedió en Alemania con el triunfo de Ángela Merkel.

El paralelismo no es casual. Es el reflejo de un liderazgo femenino que ha demostrado ser distinto al momento de ejercer la función pública, priorizando los temas sociales y las políticas públicas basadas en evidencia, por encima de las decisiones puramente políticas o partidarias.

Esperemos que las coincidencias continúen y que las políticas de Sheinbaum generen la estabilidad económica y social que logró Merkel, promoviendo la integración latinoamericana y manejando situaciones complejas con calma y decisión, lo que podría generar para México el mismo prestigio que alcanzó Alemania.

El éxito de Sheinbaum es el éxito de la mujer política en Latinoamérica y va a inspirar a más mujeres a seguir carreras políticas, desafiando el statu quo y transformando gradualmente el panorama político. Su triunfo rompe barreras, es un testimonio del progreso hacia la igualdad de género y un faro de esperanza para las futuras generaciones de mujeres líderes y más presidentas que mejoren la calidad de vida de sus pueblos, basadas en evidencias sin populismo.