Publicidad y celebridades
Las campañas publicitarias sustentadas en celebridades son cada vez más frecuentes en República Dominicana.
Las marcas buscan hacerse notar con su publicidad al apoyarse en figuras de alto reconocimiento público y de esa manera enamorar al target con la empatía que originan dichas figuras y consecuentemente vender más o potencializar su imagen.
El recurso es válido y muchas grandes marcas le han sacado mucho provecho a este camino creativo.
La clave está en seleccionar al personaje adecuado procurando ponderar su credibilidad en el mercado y su integridad para reducir riesgos.
En Oriente este recurso domina y su empleo es muy recurrente. Más que en Estados Unidos. Se reporta que un 50% de los comerciales que se exponen en los medios online y offline en el continente asiático van acompañados de celebridades que hacen recomendaciones acerca de su experiencia con las marcas.
Pero no todo es gloria con este recurso. El mismo entraña grandes riesgos y marcas muy importantes han tenido que echar para atrás sus acuerdos con figuras de gran dimensión por diversas razones.
Es muy famoso el caso de una marca de ropa que se apoyó en la fama de Angelina Jolie y posteriormente hubo de echar para atrás el compromiso porque la figura de esta gran actriz opacaba la marca.
Además de la gran inversión que entraña contratar a figuras estelares de cualquier ámbito social para endosar su imagen a una marca, también está el riesgo de la vinculación cuando surgen los escándalos y conductas cuestionables de artistas, deportistas y demás celebritys.
Podemos citar el caso de Madonna con Pepsi y toda la polémica que produjo su beso con un santo de color en un videoclip; o el caso de Britney Spears y sus escándalos (incluye raparse el cabello y aparecer drogada en unos premios), perjudicando así la marca que le había contratado para presidir su imagen; Ronaldo con su escándalo generado por su affaire con tres travestis , lo cual obligó a TIM a descontinuar su contrato con él; Rihanna y lo lejos que estuvo de los valores que promovía la marca Nivea en torno a la familia y a la fiabilidad; el caso de Lance Armstrong y los escándalos por dopaje y su posterior reconocimiento que provocaron la revocación de grandes contratos. En fin, son muchos y diversos los casos que han arruinado esfuerzos económicos considerables por dejar en rostros y fama toda la imagen de una marca.