No habrá Chapulín Colorado

Todos los gobiernos dominicanos, en grados diferentes, han incurrido en el pecado de la permisividad frente a la progresiva intrusión de haitianos en nuestro país.

Después de Trujillo y Balaguer, en cuyos regímenes los haitianos fueron mantenidos a raya, en el primer caso expulsados y en el segundo bajo estricto sistema de control a braceros contratados, los demás gobiernos se han pasado de indulgentes.

Tras la salida de Balaguer se perdió totalmente el control migratorio a causa de la búsqueda de votos electorales por todos nuestros partidos .

Pero a pesar de toda la lucha y la voz cantante del presidente de turno, más todos los recursos dirigidos a Migración y al Cesfront, en este gobierno es cuando realmente la invasión se ha atizado y desbordado.

Estamos a las puertas de un conflicto al estilo Kosovo y en ese caso solo apostamos a perder porque tenemos en contra las grandes potencias coloniales y a 11 millones de haitianos que nos odian.

Con el conflicto del canal, ese odio se recrudece más porque ese pueblo ingrato no recuerda las veces que hemos estado prestos a ayudarles en cada una de sus tragedias.

Mi parecer es que ya es muy tarde para retomar el control.

Estamos, repito, en la antesala de un conflicto en el que varios países y organizaciones internacionales son ligeros al acusarnos de racistas, xenófobos y de crímenes de lesa humanidad, cada vez que tomamos o intentamos tomar medidas de control.

Si reaccionáramos expulsando a los invasores a sangre y fuego... ahí sí habrá intervención, solo que de este lado.

Los haitianos de la calle están mejor armados que nosotros. Estarían apoyados por países y organismos internacionales y como corolario cada uno de ellos, hasta los que no han nacido aún, nos seguirán odiando.

¿Quiénes tomarán las armas para defender el suelo patrio?

¿Quiénes?

¿Los septuagenarios que nacimos nacionalistas?

¿O los jóvenes que solo saben bailar y cantar dembow, enseñar sus partes íntimas en las redes, fumar marihuana y beber al inicio de cada viernes?

¿Acaso serán nuestros guardias y policías mal pagados y peor motivados, amén de que una gran parte de ellos son de origen haitiano?

No... definitivamente para República Dominicana no hay Chapulín Colorado.