en la diana
Expectativas y riesgos de refinanciamiento
Primer Tiro
El avance en la mejora de la calificación del riesgo/país debe continuar. Los logros en materia de planificación fiscal y manejo de la deuda pública deben ser complementados con medidas que reduzcan los costos y los riesgos de refinanciamiento de la deuda consolidada. El costo del financiamiento y la efectividad de la política monetaria dependen de la demanda de los títulos de toda la deuda pública, la que a su vez depende de su rendimiento. La proyección del escenario actual indica que el gran reto es evitar un aumento del riesgo de refinanciamiento (definido como “riesgo de que no se obtengan los recursos para repagar los vencimientos de deuda, o que estos se obtengan a tasas muy altas”) de toda la deuda pública a vencerse en los próximos años. La Parada Súbita es un valor extremo de este riesgo, pues en este caso la demanda de los títulos de la deuda pública se caería súbitamente, provocando una gran crisis fiscal y macroeconómica. El riesgo tiene una alta correlación con las expectativas. Las posibilidades de reducirlo dependen de las acciones orientadas a incidir sobre los valores esperados de dichas expectativas.
Segundo Tiro
La planificación fiscal debe convencer a los inversionistas de que habrá un superávit primario suficiente para cubrir los intereses de toda la deuda pública, mientras que la programación monetaria debe continuar asegurando una paridad de interés que mantenga anclada las expectativas de devaluación y la demanda de los títulos de toda la deuda pública. Una aceleración de la devaluación acumulada de 3.8% desde el inicio de la nueva política monetaria hasta la actualidad, una tasa de interés activa con tendencia claramente alcista, un índice de precio de la deuda pública con tendencia ligeramente a la baja desde mediados del pasado mes, y una pérdida de reservas internacionales de US$ 1,515.2 millones durante el citado periodo, son algunos de los fenómenos que podrían estar indicando un ligero deterioro de las expectativas, lo que debería tomarse muy en cuenta. Los inversionistas están preparados para entender que en condiciones de alta volatilidad, la posición de la política monetaria puede y debe cambiar con más frecuencia.
Tercer Tiro
En el mes pasado el balance de los valores en circulación del Banco Central superó el billón de pesos (un millón de millones), y durante lo que resta del año en curso y el próximo, tiene vencimientos por RD$ 368,789.2 millones, mientras que los vencimientos del Ministerio de Hacienda ascienden a RD$ 60,985.4 millones, para un total de RD$ 429,774.6 millones. Un deterioro de las expectativas, que aumente la percepción de riesgo de refinanciamiento y eleve el costo de este en 200 puntos básicos, significaría un monto adicional de intereses de RD$ 8,595.5 millones anuales. Durante el resto del periodo de gobierno debería anunciarse y poner en marcha una reforma institucional de alto impacto sobre las expectativas de la sostenibilidad futura de toda la deuda pública, cuya esencia sería el traspaso de la deuda del Banco Central al Ministerio de Hacienda y la unificación de la curva de rendimiento de esta, con el primero emitiendo títulos de corto plazo, y el segundo de largo plazo. La inevitable reforma fiscal del próximo periodo de gobierno otorgaría la necesaria credibilidad de largo plazo que necesita la sostenibilidad.