PENSAMIENTO BÍBLICO
La mejor motivación
“Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas”, Josué 1:9.
En un tiempo crucial para emprender las tareas de su liderazgo, Josué, el segundo al mando en Israel para sustituir al líder Moisés, recibió esta motivación del mismo Señor.
La misión no era pequeña. Sin embargo, el llamado de Dios fue patente mediante su ineludible presencia. Josué debía ser valiente y no desmayar, pese a la dura realidad. Tenía que confiar en su Dios. No hay mayor motivación en la vida de un creyente que las promesas de Dios. Sabemos que son fieles y verdaderas. Nos impulsan a seguir peregrinado con fe en este mundo.