PEREGRINANDO A CAMPO TRAVIESA
Revolución francesa: evaluando el terror
Este articulito galopa entre ejércitos de prestigiosos historiadores batiéndose pluma en ristre. Cabalgo sobre la obra maestra de R.R. Palmer, (1940) Doce que gobernaron. ¿Qué logró el Comité de Salud Pública?
Logró reclutar los recursos humanos, materiales, morales y científicos de Francia para derrotar la contrarrevolución interna y combatir las monarquías enemigas recalcitrantes.
Fue la primera dictadura resuelta a regenerar un país. Los Doce del comité, querían construir una comunidad de una sola fe con la cual “todas las religiones, dialectos, diplomas académicos, todos los niveles de la sociedad y los intereses privados cooperasen con lealtad suprema hacia la nación común”.
Pero lograron lo contrario al establecer unos niveles de control nunca logrados antes del siglo XX.
Lo último que deseaban los franceses contemporáneos era una religión impuesta por el gobierno, o un adoctrinamiento político; tampoco una moral impuesta por la autoridad, ni ser reclutados para el ejército, ni ver sus recursos confiscados, ni padecer precios y salarios impuestos y mucho menos, la supresión de sus costumbres locales en aras de una universalidad cocinada en París. Lo que el Comité quería, solo lo lograrían los gobiernos totalitarios del siglo
El Comité creó “legalmente” tribunales que redujeron los juicios a la presencia física de los acusados.
Se les juzgó tan rápidamente que, en siete semanas condenaron a muerte a más franceses que en los catorce meses anteriores.
Protestaban que cada purga era la última, pero los sobrevivientes lo dudaban.
La incertidumbre diaria era tal, que cuando cayó Robespierre, su colega Barère, llevaba en sus bolsillos dos discursos: uno favorable y otro condenando al “Incorruptible”.
Robespierre predijo que Francia acabaría en manos de un militar. Recorramos la ruta revolucionaria de Luis XVI al Emperador Napoleón.
El autor es Profesor Asociado de la PUCMM