Fracasa llamado al diálogo para destrabar la elección de presidente en Líbano
El diálogo político propuesto la semana pasada por el jefe del Legislativo libanés, Nabih Berri, para tratar de acordar un jefe de Estado no tendrá lugar, por lo que todo apunta a que el país terminará el año sin presidente a falta de una sola sesión de votación más en 2022, prevista para mañana jueves.
Una fuente parlamentaria que pidió el anonimato confirmó este miércoles a Efe que "no habrá diálogo" y detalló que mañana se celebrará únicamente una nueva votación presidencial, sin encuentros entre los diferentes bloques de la Cámara para negociar una salida al estancamiento.
Tras finalizar el pasado jueves el último intento infructuoso de elegir a un jefe de Estado, puesto vacante desde el 31 de octubre, Berri llamó al diálogo, en su segunda iniciativa oficial con este objetivo después de que un intento similar fracasase dos días después de comenzar el vacío en la Presidencia.
El Parlamento se ha reunido ya nueve veces para tratar de nombrar a un presidente, pero el candidato más votado en casi todas las sesiones, Michel Moawad, hijo del exmandatario libanés Rene Moawad, se queda siempre a alrededor de una veintena de apoyos de la mayoría absoluta.
El escenario se repite una y otra vez debido a la decisión de la coalición del grupo chií Hizbulá, opuesto a Moawad, de votar en blanco.
Al término de una reunión con Berri este miércoles, el vicepresidente del Legislativo, Elias Bou Saab, reconoció que "no ve que siga habiendo una posibilidad de diálogo para lo que queda de año", pese a ser la única vía para nombrar a un jefe de Estado, según un comunicado del Parlamento.
Bou Saab explicó que varios "entes" rechazaron participar o pusieron condiciones para hacerlo, sin especificar qué líderes y partidos se opusieron a la iniciativa.
Las Fuerzas Libanesas, una de las principales formaciones cristianas del Hemiciclo, fueron de las pocas en rechazar públicamente el diálogo al considerar que cualquier negociación debe tener lugar durante una sesión oficial y ante los ojos de todos.
Paralelamente, se ha elevado la tensión también en el seno del Gobierno, interino desde el pasado junio y que constitucionalmente debe asumir los poderes presidenciales en caso de vacío en la Jefatura de Estado.
El Movimiento Patriótico Libre, del último presidente libanés, Michel Aoun, se opone a ello y boicoteó el Consejo de Ministros celebrado la semana pasada como medida extraordinaria para aprobar asuntos urgentes, su primera reunión desde que entró en la interinidad.
La reunión del Gabinete desató riñas a varios niveles, incluso entre los aliados Movimiento Patriótico Libre y Hizbulá, y en los últimos días se han producido encuentros a diferentes bandas para tratar de encauzar las aguas en el único órgano de poder en activo.