El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos insta a Sudán a que anteponga los intereses del pueblo
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Turk, ha instado a Sudán a que anteponga los intereses de los ciudadanos en las negociaciones políticas de las autoridades en el proceso hacia la transición a la democracia.
"Mientras continúan las negociaciones políticas hacia un marco para una nueva transición, insto a todos los involucrados a dejar de lado posiciones arraigadas, juegos de poder y sus intereses personales, y centrarse en los intereses comunes del pueblo sudanés", ha afirmado Turk en una conferencia de prensa en la capital de Sudán, Jartum.
El nuevo jefe de DDHH de la ONU ha indicado que "el futuro del país depende" de los "pasos audaces hacia el consenso", así como la protección de los Derechos Humanos como "fuerza impulsora", para poner fin a la "incertidumbre que ha dejado a gran parte de la población en peligro".
Turk, que ha realizado su primera visita al país africano, ha asegurado que el golpe militar de octubre 2021 que puso fin al poder compartido entre civiles tras el derrocamiento del entonces dictador Omar Al Bashir había dejado a Sudán "en una bifurcación decisiva en el camino".
El Alto Comisionado ha indicado que, en este contexto de décadas de represión, es un gran desafío generar confianza entre las autoridades y la población.
En este contexto, ha abogado por la implementación urgente del Acuerdo de Paz de Juba para restaurar la autoridad civil. Así, ha reconocido que "la situación es sombría", pero ha asegurado que las herramientas para superar desafíos están al alcance de la mano.
Las instituciones estatales deben ser representativas, accesibles y trabajar para todas las personas, en especial las mujeres y los más vulnerables, ha señalado.
Además, Turk ha hecho un llamamiento a las autoridades para que instruyan a las fuerzas de seguridad para que respondan a las manifestaciones de conformidad con las leyes y normas de Derechos Humanos.
"Las personas tienen derecho a la reunión pacífica, y el Estado tiene la obligación de garantizar que este derecho pueda ejercerse sin temor a recibir disparos", ha dicho tras señalar que su oficina ha documentado el uso excesivo de la fuerza contra los manifestantes que se ha saldado con más de un centenar de muertos y 8.000 heridos.
En esta línea, el jefe de Derechos Humanos de la ONU ha pedido que las víctimas sean reconocidas, los supervivientes compensados y los culpables investigados. "La impunidad engendra más violencia. Hay que abordarlo de frente", ha destacado.