Escasez de combustible complica la situación en Haití
Hay escasez de combustible en Haití desde hace varias semanas
El área metropolitana de Puerto Príncipe amaneció este miércoles bajo tensión por la persistente escasez de combustible en Haití desde hace varias semanas, lo que ha disparado el precio de los productos básicos.
En Delmas, decenas de motociclistas protestaron contra la escasez de combustible, lanzando piedras y levantando barricadas de neumáticos quemados en la carretera, creando una situación de pánico en la autopista.
Se escucharon fuertes disparos en varios barrios, incluida la zona del Carrefour de l'Aéroport. "No podemos seguir soportando la situación", dijo a Efe un manifestante, que se dedica a dar servicio de mototaxi, quien se quejó de la falta de clientes debido al incremento de los precios.
Mientras denunciaba la situación de inseguridad reinante en el país, a causa del enfrentamiento entre bandas armadas, afirmó que, se están "empobreciendo más".
En Lalue, los manifestantes intentaron bloquear algunas carreteras para protestar contra la escasez de combustible, mientras que el tráfico se ha ralentizado desde la zona del mercado de Canapé Vert.
En el mercado informal, el galón de combustible se vende a más de 1.500 gourdes (12,8 dólares), el doble del precio que en una estación, algunas de las cuales llevan días cerradas, al igual que oficinas públicas y privadas.
El aumento del precio del combustible en el mercado informal ha duplicado o incluso triplicado el precio del transporte público en las calles de Puerto Príncipe.
En las calles, la población denuncia a "ciertos actores" que quieren crear escasez para aumentar el precio de estos productos.
Las autoridades "prometen financiación para el pueblo, pero no se ha hecho nada", dijo a Efe otro manifestante, quien advirtió que se están "movilizando" y van a "bloquear todas las áreas". Desde hace tres años, Haití se enfrenta a la escasez de combustible, lo que aumenta automáticamente el costo de la vida.
Paralelamente, la empobrecida nación vive un aumento de la violencia entre las bandas armadas, situación que se ha recrudecido desde el asesinato hace un año del presidente Jovenel Moise.