Australia reabre sus fronteras por primera vez desde su cierre en marzo de 2020 por el coronavirus
Las autoridades de Australia han suavizado este lunes por primera vez las restricciones fronterizas en el país desde el inicio de la pandemia de coronavirus, lo que ha permitido el regreso de ciudadanos australianos a la isla, según han recogido los medios locales.
Los pasajeros de un vuelo de la aerolínea Quantas que despegó de la ciudad estadounidense de Los Ángeles han sido los primeros en llegar al país tras la entrada en vigor de la medida, que permite a aquellos viajeros vacunados contra la COVID-19 llegar al país sin entrar en cuarentena.
Los cambios en estas restricciones permitirán a miles de australianos volver al país o realizar visitas a familia y amigos, en muchos casos por primera vez desde el cierre de las fronteras en marzo de 2020, según ha informado el diario australiano 'The Sydney Morning Herald'.
Por otra parte, Australia ha anunciado que permitirá a partir del próximo 21 de noviembre la entrada de viajeros totalmente inmunizados contra la COVID-19 desde Singapur sin necesidad de realizar cuarentena, después de anunciar el domingo que harán lo propio con los viajeros procedentes de Nueva Zelanda a partir de este lunes.
"Esto significa que en cuestión de semanas Australia recibirá turistas de dos de sus diez destinos de viaje más importantes", ha defendido el primer ministro australiano, Scott Morrison, en una rueda de prensa en Roma durante la cumbre del G20.
Morrison, que se ha reunido con su homólogo de Singapur, Lee Hsien Loong, durante la cumbre, ha defendido que los acuerdos suponen "el impulso de miles de millones de dólares que la industria turística ha estado esperando".
El acuerdo se refiere exclusivamente a los ciudadanos de Singapur, y no a los de otras nacionalidades que utilicen el país para llegar a Australia, recoge el medio 'The Sydney Morning Herald'.
En Singapur, un país de más de cinco millones de habitantes, han muerto 394 personas por la COVID-19 desde que comenzó la pandemia, y está completamente inmunizado contra la enfermedad el 82 por ciento de su población.
Australia, por su parte, de 25 millones de habitantes, ha registrado casi 1.700 muertes, y ha vacunado completamente al 65 por ciento de su población, según datos de la Universidad Johns Hopkins.