El inicio de un nuevo año trae consigo energías renovadas y nuevas metas. Enero es el mes por excelencia para planificar el año y establecer objetivos en lo personal (salud, relaciones, finanzas…) y en el área profesional (una promoción, un nuevo trabajo, un emprendimiento…).

Una de las formas más efectivas de asegurar un 2025 lleno de satisfacciones y es priorizando la formación académica. “Como seres humanos, nuestro crecimiento personal y profesional deben ir de la mano. 

Si bien es importante establecer metas claras para avanzar en nuestra vida laboral, es esencial también invertir en nuestra formación continua para ser más competitivos en un mercado laboral cada vez más exigente”, explica Ángela Liriano, coach especialista en empleabilidad, inserción laboral y desarrollo de personal, y docente de la Universidad Iberoamericana, Unibe.