Ante pandemia, protocolo busca llevar seguridad a diabéticos

Desde antes del Co­vid-19 hacer su entrada al país, se había informa­do sobre la vul­nerabilidad de las personas con diabetes a este virus. Desde en­tonces, los miembros de las Fun­dación Aprendiendo a Vivir co­menzaron su labor de ayuda para hacer menos drástica esta situación y garantizar, a través de sus orientaciones, la salud de los pacientes que viven con esta enfermedad.

Debido a la pandemia, se man­tiene en trabajo constante, y aho­ra acaba de anunciar a través de su portal www.ganemosle.com, los nuevos programas y recursos gratuitos que ha implementando desde abril, y que han dado muy buenos resultados

Sus integrantes informan que durante estos meses, y cómo par­te de su nueva estrategia de edu­cación, la fundación ha entrega­do insumos a familias necesitadas cada quince días, como insulinas, tirillas, jeringuillas, entre otros esenciales para medir y controlar la diabetes. Además, ha produci­do guías educativas gratuitas so­bre protocolos de manejo frente a síntomas de enfermedad y conse­jos prácticos cuando se tienen ni­ños en casa todo el día.

Pusieron en marcha una ‘Línea de emergencia’ para consultas y soporte psicológico y un Podcast con todo lo que necesitas saber sobre diabetes de la mano de ex­pertos en conversaciones de cin­co minutos.

Trabajo constante Por cerca de quince años, la Fun­dación Aprendiendo a Vivir ha venido desarrollando programas de educación y ayuda para cien­tos de familias dominicanas con la condición de diabetes. Estas ini­ciativas continuaron, sin pausas, durante el Estado de Emergencia, a raíz de la declaración de pande­mia global del Covid-19.

Estas iniciativas se suman a proyectos como ‘Ganémosle la Carrera a la Diabetes 10K-5K’, en la que participan anualmente al­rededor de 1,500 personas entre niños, adolescentes; el ‘Campa­mento de Verano Campo Amigo’, dos fines de semana durante el mes de junio con programas de educación para la familia sobre manejo y cuidado; y en ‘En el Ca­mino’, una serie de visitas a pro­vincias y áreas rurales de Repúbli­ca Dominicana durante el verano para educar sobre diabetes a per­sonas de escasos recursos, y el control de la misma.