David tuvo porcentaje de bateo de .375 ante Ervin Santana y .344 a Mariano Rivera

La historia revela que Pedro Martínez fue quien colocó a David Ortiz en el trayecto de Boston, ciudad que lo acogió como un hijo, le brindó la oportunidad y confianza que antes se le había negado y con el liderazgo y carisma que adornaron su carrera hoy está a horas de recibir su bautismo en Cooperstown.

Desde este domingo ambos compartirán por siempre el mismo escenario, tras construir carreras tan brillantes en la franquicia que los convirtieron en baluartes de la primera corona alcanzada por los Medias Rojas en 86 años y luego llegaron dos más.

Empero, ¿como fue la rivalidad entre ellos, sus enfrentamientos. ¿Quién superó a quién en las ocasiones en que les correspondió medir sus fuerzas?.

Según los anales el primer match David versus Pedro se produjo en 1998, a la sazón el pitcher exhibiendo su talento en su primera campaña en Boston y David, siendo un jugador alterno en su segunda estación con los Mellizos.

De 6-2 le bateó Ortiz a su coterráneo en ese primer año, incluido un doblete, mientras que tres años después volvieron a reencontrarse y Martínez lo retiró en tres viajes. Al año siguiente se midieron en dos partidos y en el último turno de ellos, el 16 de agosto, Ortiz le disparó un jonrón solitario a Martínez en la séptima entrada, luego de un out, en un éxito de los Mellizos 5-0 ante Boston.

Ortiz ocupó el cuarto puesto en la alineación, el vuelacercas fue su 15 de la campaña, de los 18 que produjo esa estación. En total, Ortiz bateó de 17-3 ante Martínez para un average de .176, le disparó un jonrón, un doblete, recibió un boleto y fue abanicado en seis ocasiones.

Desempeño ante otros compatriotas

Los pitchers dominicanos a los cuales David atacó con fiereza fueron Ervin Santana, a quien le promedió .375 (32-12) con cuatro jonrones, tres dobletes y nueve remolcadas; a Ivan Nova le bateó para .385 (26-10) con dos vuelacercas y cinco producidas, además de un trío de tubeyes; A Miguel Batista le conectó para .381 (21-8) con dos bambinazos y ocho empujadas, quien también lo transfirió en seis ocasiones; A Roberto Hernández para .423 con un jonrón y cinco producidas, además de un trío de dobletes; Ramón Ortiz de 17-5, de los cuales cuatro fueron jonrones y todos fueron con las bases limpias; Joaquín Benoit para .294 (23-7) con un vuelacercas, cuatro empujadas; Daniel Cabrera de 26-7 para .269, incluido un tubey y nueve boletos; a Danny Salazar le disparó de 8-4 para .500 y a Luis Severino de 7-3, siendo todos sus batazos jonrones y al igual que Ortiz los mismos se produjeron sin nadie en bases.

Bartolo, Ubaldo y Cordero, los más dominantes

Bartolo Colón es entre los dominicanos uno de los lanzadores que más éxitos tuvo frente a Ortiz. El regordete lo obligó a batearle para apenas .140 (50-7) con 16 ponches y solo concedió cuatro boletos. A Francisco Cordero nunca le conectó de imparables en seis turnos; Mientras que Ubaldo Jiménez lo obligó a batearle para solo .160 (25-49, pero el Big Papi le conectó un par de vuelacercas. Jiménez lo ponchó en cinco ocasiones.

A Dámaso Marte, quien permaneció tres estaciones con los Yankees y quien tenía entre sus prioridades básicas enfrentar a Ortiz en situaciones difíciles lo obligó a batearle de 16-2 para un average de .125; A Juan Carlos Cruz de 3-0, al extinto José Lima le bateó de 7-1, a Félix Heredia de 6-1, y el mismo registro ante Wandy Rodríguez y Francisco Liriano.

Frente a pitchers de Cooperstown

Ortiz no tuvo mucha suerte frente a Randy Johnson, ranqueado como el mejor zurdo de su generación y se fue de 25-4 para un promedio de .160, con siete ponches y dos boletos. Le conectó tres dobletes. En cambio atacó con fiereza a Mariano Rivera, a quien le bateó para .344 (32-11) con un vuelacercas y cuatro empujadas. Ante Greg Maddux se fue de 6-1 con un jonrón. Mientras que frente a Roger Clemens, quien aunque no está en el salón de la Fama, tejió una carrera digna de alcanzar este sitial, Ortiz se fue de 23-5 para .217 con dos jonrones y un par de producidas, recibió cuatro boletos y fue abanicado en seis oportunidades.