Nelson Cruz, el toletero que cambió el bate por la gerencia del Clásico Mundial

El jardinero dominicano Nelson Cruz fue oficialmente anunciado este lunes como el gerente general de la selección que representará al país en el próximo Clásico Mundial de Béisbol, que se celebrará del 9 al 25 de marzo de 2023.

Se trata de una contratación algo inusual debido a que Cruz todavía sigue jugando el deporte al nivel más alto, en Grandes Ligas, y por el hecho de que reemplazará a Moisés Alou, arquitecto del único campeonato mundial de República Dominicana.

A pesar de esto, se esperan buenos resultados en el próximo certamen, siendo Cruz una figura respetada entre sus contemporáneos y jóvenes estrellas criollas por igual, además de tener la experiencia de haber jugado en tres de los cuatro Clásicos que se han organizado.

Su primera participación ocurrió en 2009, siendo esta la actuación más decepcionante de la escuadra dominicana ya que ni siquiera lograron pasar de la primera ronda.

Sin embargo, en 2013 República Dominicana logra una actuación histórica al ganar el torneo de manera invicta, siendo Nelson Cruz uno de los pilares del equipo, con un promedio de bateo de .303, porcentaje de embazarse de .324, un slugging de .424 y 6 empujadas, que le valió un puesto en el equipo ideal del certamen.

En 2017 Cruz regresa al equipo, y aunque obtuvo una mejor línea ofensiva (.300/.417/.850/3 HR/5 RBI), los criollos no pudieron sobrevivir la segunda ronda al perder en contra de los seleccionados puertorriqueños y estadounidenses, con ambas escuadras convirtiéndose en finalistas de ese Clásico poco tiempo después.

Un veterano

El haber participado en los últimos tres Clásicos delata la veteranía de Cruz, pero no cuenta la historia completa, puesto que el dominicano de 42 años ha participado en 18 campañas de Grandes Ligas.

Esto tampoco significa que su camino al estrellato fue fácil. Fue firmado por los metros de Nueva York como agente libre amateur en febrero de 1998. Dos años después fue cambiado a los Atléticos de Oakland por el utility venezolano Jorge Velandia.

Para 2004, todavía sin debutar en Grandes Ligas, es nuevamente cambiado a los Cerveceros de Milwaukee, franquicia con la que por fin alcanzó el sueño de jugar en la Gran Carpa, aunque brevemente.

Y es que en esa campaña sólo disputó 8 partidos y tomó 7 turnos, siendo cambiado una vez más, en esta ocasión a los Vigilantes de Texas donde pudo establecerse, pero no de manera inmediata.

Sus primeros tres años en Texas fueron bastante inconsistentes, puesto que nunca sobrepasó los 100 partidos jugados.

Pero en 2009 fue nombrado a su primer juego de estrellas, continuando su excelente producción en los próximos dos años, al ser uno de los principales peloteros que ayudaron a los Vigilantes a alcanzar la Serie Mundial en temporadas consecutivas.

A partir de esos éxitos ya Cruz era considerado como uno de los mejores bateadores de la liga, al ser nombrado al juego de estrellas cinco veces en un periodo de seis años, ganando además cuatro premios de Bate de Plata, otorgado al mejor bateador de su respectiva posición.

En Grandes Ligas vistió los colores de los Cerveceros, Vigilantes, Orioles de Baltimore, Marineros de Seattle, Mellizos de Minnesota, Rayas de Tampa Bay y Nacionales de Washington.

Y, a pesar de que ha jugado la mayor cantidad de partidos en Texas (796), con los Marineros dio su mayor cantidad de cuadrangulares (163) aunque solo jugó 4 años con ese equipo, al sobrepasar los 37 vuelacercas todas las temporadas en Seattle.