Con mucho talento, pero poca química afectó a los Indios

Juan Miguel Suero volvió a ser el jugador más completo de los Indios de San Francisco de Macorís.

Juan Miguel Suero volvió a ser el jugador más completo de los Indios de San Francisco de Macorís.

Lo pensado por el entrenador David Díaz y la gerencia de los Indios de San Francisco de Macorís para la temporada de la Liga Nacional de Baloncesto resultó en todo lo contrario.

“Antes de empezar a trabajar con tiempo entendía que en conjunto con la gerencia teníamos el mejor grupo de jugadores en la historia como entrenador del equipo”, señala Díaz quien guió al equipo a la corona en el 2019.

Sin embargo, en la cancha no se vieron los frutos y con una marca de 4-10 el equipo ocupó la última posición entre los ocho quintetos que iniciaron la contienda.

"Era un grupo nuevo, tal vez los primeros ocho nunca habían jugado juntos. Llegaron a tiempo, pero uno de los refuerzos, Jalen Robinson (1.0 ppj, 6.0 rpj, dos partidos) llegó con buenas credenciales, pero desde los fogueos sentimos que no era el indicado", añade Díaz, quien también ganó el torneo de 2013 con los Indios.

Dijo que el otro importado, Nick Wiggins (6.8 ppj) se mostraba como un “verdugo” en las prácticas, pero cuando inició la justa se cayó y no volvió a levantar cabeza.

"Foster (Greg, el tercer importado, 10.8 ppj, 2.5 apj) entendíamos que podía hacer el papel del año anterior (2019), pero al parecer al no ser los mismos jugadores no se entendió ni aportó lo que creíamos", agrega el entrenador que también fue campeón con los Leones de Santo Domingo en 2016.

Señaló que ni Mike Torres (7.4 ppj, 2.9 apj) ni Kiril Wachsmann (2.2 ppj, 3.0 rpj) se pudieron adaptar al sistema de juego en la liga, aunque el veterano Edward Santana (10.1 ppj, 5.6 rpj) sí cumplió con el rol que se asignó.

"Hubo que cambiar a Gerardo (Suero) ya que muchos jugadores entendían que su presencia no les permitía rendir por lo que la gerencia tuvo que hacer el movimiento buscando soluciones", explicó el coach.

Pero con la excepción de su hermano Juan Miguel (18.4 ppj, 6.1 rpj, 3.3 apj) y Ron Roberts (10.1 ppj, 6.3 rpj), los jugadores no respondieron luego del traspaso de Gerardo. Resaltó la inclusión en la parte final de Al´Lonzo Coleman (7.4 ppj, 6.2 rpj), pero enfrentó problemas de lesiones.

"No hubo química, perdimos muchos juegos que íbamos dominando y pasaba algo increíble que nos hacía caer. Pero nos ha servido de experiencia, me quedan dos años de un contrato de tres y vamos a comenzar a trabajar desde ahora en la estructuración para no cometer los mismos errores. Fue una temporada para olvidar. Teníamos un buen grupo de jugadores, pero nunca conformamos un buen equipo", sentenció Díaz.