Reflexiones del director
Con los chicos de la Católica
Hace unos días, tuve la oportunidad de compartir una charla-conversatorio con los jóvenes estudiantes de comunicación social de la Universidad Católica de Santo Domingo.
Les aseguro que fue un encuentro enriquecedor, lleno de reflexiones que quiero compartir también con ustedes.
En esta era de avances tecnológicos, les dejé claro a los muchachos que deben empeñarse en aprender y ganar destrezas en el manejo de aplicaciones de Inteligencia Artificial (IA).
Estas herramientas están revolucionando el periodismo, permitiéndonos acceder a datos, organizar información y generar contenido de manera más eficiente.
Pero ojo, les recordé que estas tecnologías son solo un medio, no el fin.
No podemos olvidar que el periodismo, en su esencia, sigue siendo la búsqueda y difusión de la verdad.
Por eso les insistí en que, más allá de los beneficios prácticos que puedan obtener de la IA, lo importante es que nunca violenten las normas éticas ni los principios que guían nuestra profesión.
En estos tiempos, la responsabilidad de los periodistas no es poca cosa.
Las audiencias, sobre todo las de medios impresos, están exigiendo más calidad y profundidad en los contenidos.
Ya no basta con reproducir la misma noticia que todos conocen; ahora hay que ir más allá, investigar, exponer esos ángulos que se quedan fuera del radar y que muchas veces las versiones digitales no logran abarcar.
Aquí es donde les animé a que se conviertan en expertos en el manejo racional de la big data, esa enorme cantidad de información que, bien utilizada, puede ofrecernos un sinfín de perspectivas nuevas.
Una cosa en la que fui enfático es que el periodismo de calidad, el periodismo independiente, es más necesario que nunca.
Vivimos en una época donde los grupos de poder, y hasta ciertos sectores populistas, intentan controlar la información.
Esto está provocando que una gran parte del público se aleje, cansada de la polarización y el ruido.
En este contexto, los futuros periodistas tienen una misión clave: ser esa voz que rescate los hechos, que acerque las noticias a las necesidades, realidades y aspiraciones de la gente.
Y precisamente por eso, en el Listín Diario estamos promoviendo un periodismo más cercano, más humano.
Les conté cómo estamos llevando la voz de los comunitarios de los barrios capitalinos y de los líderes provinciales directamente a nuestras páginas.
Porque, al final del día, el periodismo tiene que reflejar lo que pasa en las comunidades, lo que la gente vive y espera.
Es una tarea noble y necesaria, y estoy convencido de que, con ética, verdad y un buen uso de las herramientas que la tecnología nos brinda, lograremos seguir sirviendo a la sociedad de la mejor manera posible.