La mujer, cada vez con más poder
La presencia de mujeres en los binomios presidenciales para las elecciones de mayo es un elocuente reflejo del papel cada vez más decisivo que ellas juegan en la vida política de este y otros países.
Al conmemorarse hoy, justamente, el Día Internacional de la Mujer, que tiene su génesis en el martirologio de tres dominicanas ejemplares, su rol como arietes de poder está más que cimentado.
Su participación activa en la política latinoamericana ha sido fundamental para lograr una representación equitativa en los centros de mando del Estado.
Y ha contribuido a garantizar, por ende, la diversidad de ideas y enfoques que una sociedad necesita para la toma de decisiones no excluyentes o discriminatorias por razones de género.
Gracias a ese papel activo, se han logrado aprobar leyes y políticas que promueven la igualdad de género y acceso equitativo a recursos destinados a fomentar una cultura de inclusión y respeto.
Algunas mujeres, como Kamala Harris, vicepresidenta de Estados Unidos; Ángela Merkel, primera canciller de Alemania; Ellen Johnson Sirleaf, primera presidenta de África y Premio Nobel de La Paz, han sido ejemplos relevantes de la promoción de estas políticas inclusivas.
También en América Latina hay otras que han dejado huellas de sus logros, como Michelle Bachelet, en Chile, y Dilma Rouseff, en Brasil.
Otras, sin embargo, han enfrentado obstáculos como resistencia política, corrupción o crisis económicas, lo que ha influido en sus mandatos.
Estos desafíos, sin embargo, son una muestra de que nuestras sociedades, sean dirigidas por hombres o por mujeres, necesitan fortalecer las instituciones democráticas.
Y para esto es vital que promuevan los ejercicios de transparencia, el respeto a los derechos humanos y la participación ciudadana en la toma de decisiones.