Netflix está combatiendo las contraseñas compartidas: ¿un problema de ciberseguridad o estrategia comercial?

La plataforma ensaya un nuevo sistema para cobrar a los usuarios que compartan sus contraseñas con personas que no vivan en su misma casa

Plataforma Netflix. Foto de archivo

Plataforma Netflix. Foto de archivo

Netflix está ensayando un nuevo sistema para cobrar a sus usuarios una tarifa extra en el caso de que estén compartiendo su contraseña con personas que no se encuentren en su mismo domicilio. Se trata de un proyecto piloto de la popular plataforma de streaming de contenidos online que está levantando bastante polémica. Además, esta medida viene seguida de otros aumentos de precio en los servicios ofrecidos por Netflix.

Como Netflix acostumbra a ensayar sus políticas en Estados Unidos para luego exportarlas al resto del mundo, es posible que dentro de poco se vea un aumento considerable de las tarifas en otros países. Queda abierto entonces el debate de si esta nueva tarifa de Netflix (de 3 dólares, en el caso de Estados Unidos) cumple con un propósito relacionado con la ciberseguridad, o si simplemente es un recurso de Netflix para tratar de ganar más dinero a cambio de ofrecer el mismo servicio.

El riesgo de compartir contraseñas

Un punto a favor de la propuesta de Netflix es el hecho innegable de que las contraseñas compartidas suponen un riesgo de ciberseguridad. Incluso si las personas con quienes compartimos nuestra contraseña son de confianza, el hecho de que una misma clave de Netflix esté utilizando en diferentes dispositivos conectados a distintos routers multiplica los riesgos de que esta contraseña sea interceptada por ciberatacantes. Y, definitivamente, esa información es muy jugosas debido a que las cuentas disponen de información bancaria de los usuarios.

En este sentido, el movimiento de Netflix podría estar justificado en aras de la protección de los usuarios. Pero el mero hecho de cobrar una tasa no impide a los usuarios seguir compartiendo su contraseña, con lo que no parece que esta sea la intención de Netflix.

¿Cómo proteger tus contraseñas?

Se debe recordar no obstante que las contraseñas son una de las principales barreras con las que contamos para proteger las cuentas online frente al aumento de los ciberataques que está teniendo lugar en todos los rincones del mundo. Este incremento de los hackeos a nivel global ha sido especialmente notable a partir de 2020, cuando la pandemia del coronavirus impulsó todavía más un proceso de digitalización en todos los sectores que ya había comenzado hacía varios años, y que últimamente no ha hecho más que acelerarse.

Utilizar un gestor de contraseñas es actualmente una de las mejores soluciones con las que los usuarios cuentan para mantener seguras sus claves. Este software permite almacenar cientos de contraseñas diferentes para todas las cuentas online, incluyendo la cuenta de Netflix, las claves bancarias o la contraseña del correo. Al almacenar todas estas claves bajo una encriptación de última generación, un gestor de contraseñas permite utilizar contraseñas robustas y únicas para cada una de los cuentas y, de esta forma, y reducir al mínimo el riesgo de vulneración en cada una de ellas.

Las alternativas que ofrece Netflix

Netflix no está ofreciendo actualmente a sus usuarios ninguna alternativa al pago de esta tasa extra a cambio de compartir su contraseña. Los usuarios pueden proteger sus claves para compartirlas de forma segura mediante los servicios de algunos de los mejores gestores de contraseñas del mercado, pero eso no cambia que Netflix siga queriendo cobrar esa tasa.

Si lo que el usuario quiere es no pagar esta tarifa extra de Netflix, entonces solo tiene dos alternativas: o bien dejar de compartir las contraseñas con amigos que no viven en casa, u optar por otras plataformas alternativas más económicas, como son en estos momentos Disney Plus, Prime Video o HBO.

¿Es legítimo que me cobren por compartir mis contraseñas de Netflix?

Es importante tener en cuenta que Netflix está en su derecho de proponer una tarifa extra para quienes están compartiendo sus contraseñas con personas que no viven en su domicilio, ya que los términos de Netflix explicitan que cada cuenta está autorizada para su utilización dentro de un único hogar.

Sin embargo, es evidente que esta tarifa está pensada para un modelo de familia que no encaja con la realidad actual, en la que resulta normal que tres o cuatro personas de la misma familia puedan pagar por una misma cuenta de Netflix aunque no vivan bajo el mismo techo.