Ideas Puntuales
Un Gobierno desgastado
El Gobierno de Luis Abinader empezó a desgastarse tras el triunfo del mandatario en mayo pasado. Su discurso de no reelección dio paso a una reunión con los precandidatos presidenciables de su partido, y estos a su vez iniciaron campañas con la idea de heredar el cargo presidencial.
Cada uno está, como se diría en términos del beisbol, jugando en su propio play, y ejecutando diferentes estrategias de redes y comunicacionales para venderse como la mejor opción.
El gobierno como estructura, que abarca todas las instituciones y funcionarios públicos, está desgastado, no existen acciones que los haga quedar bien.
Lo último ha sido la entrega de bonos navideños. Además de la cantidad que sobrepasaba los datos del número de pobres, muchos se quedaron sin recibirlos; personas que no debían estar inscritas aparecían, la página de verificación se dañó sin arreglo, funcionarios repartieron como quisieron, algunos se grabaron entregándolos en cualquier lugar y la encargada de la entrega, resultó ser una vocera.
Abinader está tan desgastado que una de sus últimas inauguraciones fue una capilla del CUSEP y hasta una nota de prensa de esa actividad se mandó a los medios.