Todavía hay varios temas que siguen siendo de gran preocupación en la República Dominicana: la alimentación, la falta de techo, la gran presencia de inmigrantes ilegales y la corrupción. Sin garantizar la solución de estos problemas, no podemos hablar de un progreso pleno en el país. Hablar de progreso sin abordar estos desafíos es no alcanzar verdaderos avances. Es imperativo resolver estos problemas, por lo cual son una preocupación constante que requiere atención urgente. Estos desafíos representan tareas concretas para nosotros en el futuro, y debemos enfocarnos en ellos con determinación. Son temas prioritarios y tareas pendientes que debemos enfrentar. Hasta mañana, si Dios, usted y yo lo queremos.
