Pensando
Honor a Duarte y a los Trinitarios
El pasado lunes, día histórico por el fallecimiento del fundador de la Patria dominicana acaecido el 15 de julio de 1876, queremos reverenciar al dominicano más importante que nos dejó el mayor legado que ciudadano alguno pueda heredar, que es el honor de tener patria para morir en dignidad. En su Ideario, Duarte, junto a nuestros próceres Trinitarios, nos enseñó que no importa banderías políticas y mucho menos el interés mercurial posesivo; se trata del punto de confluencia de las ideas libertarias, que fueron la semilla de la creación y fundación de nuestra nacionalidad. El denominador común de sus acciones junto a los Trinitarios, siempre merecerá el reconocimiento en una sociedad que reciba respuesta a sus reclamos. Con el objetivo de aunar voluntades, Duarte señaló en la casa de Manuel J. Del Monte: “todo pensamiento de mejora en que el sentimiento nacional se postergara a la conveniencia de partidos, debía siempre reprobarse, porque puesto en ejecución, constituía delito de lesa patria”. No es un secreto que en los momentos actuales los partidos políticos no han coincidido en lo que significa el más sublime sentimiento nacional, como bastión para enfrentar las conspiraciones y maquinaciones de una invasión que está a la vista de todos. Es preciso comenzar a mirar el futuro, no manchado de verde, blanco, morado o rojo; debemos marchar con el lienzo tricolor, porque a la postre, será lo que nos una a todos los dominicanos. Pocos lo han asimilado. ¡Nosotros lo mantendremos siempre!