Umbral
Abinader, Moreno y los oscuros entramados Offshore
El presidente de Alianza País (ALPAÍS), que ha aspirado a la Presidencia de la República en diversas ocasiones por esa formación política y que ahora es el candidato a la senaduría del Distrito Nacional por el partido de gobierno, posteó en la antigua red social Twitter, hoy X, según da cuenta el Listín Diario en una información aparecida en su plataforma digital del 6 de octubre de 2021, bajo el título “Guillermo Moreno cree MP debe investigar a los mencionados en Papeles de Pandora”, que el ministerio público debía “abrir una investigación y ordenar una auditoria forense, entre otras medidas, respecto a los funcionarios públicos, incluyendo al presidente Abinader, ex funcionarios y empresarios que aparecen en los ‘Papeles de Pandora’”.
Con su post, Moreno pretendía entrar al debate suscitado a nivel mundial luego de que el 2 de octubre de 2021 el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ, por sus siglas en inglés) filtró a los medios de comunicación cerca de 12 millones de documentos que estremecieron a la opinión del planeta, ya que involucraba no sólo a personalidades del mundo empresarial y a individuos de este mundo que alcanzaron la Presidencia de la República en países como argentina Chile y República Dominicana que al momento de la filtración estaban en ejercicio, sino hasta artistas, religiosos e incluso al gobernador de un banco central. Pese al escándalo que se extendió en el tiempo por toda la geografía global y que rozó, aunque fuera en términos de opinión, a la justicia, en nuestro país fue rápidamente ahogado por la estrategia comunicacional palaciega de ocultar, mediante la compra del silencio, verdades incómodas e inconvenientes, y construir un relato mágico que hace ver las bisuterías que resultan de la gestión de esta administración de gobierno, como alhajas.
Entre los periodistas que trabajaron en la develación de los documentos estuvieron Jan Martínez Ahres y Javier La fuente, quienes el 3 de octubre de 2021, en un trabajo extenso publicado por el periódico El País, escribieron: “…una constelación de personajes poderosos de Latinoamérica ha hecho uso a lo largo de los años de paraísos fiscales. Pese a habitar en la región más desigual del planeta, esta élite ha empleado una telaraña de fideicomisos, sociedades interpuestas y archivos mercantiles opacos en sitios como Islas Vírgenes Británicas o Panamá para evitar el escrutinio…”. Si comparamos las acciones de los personajes involucrados descritas aquí, podemos notar que hay una relación entre la opacidad y el discurso de transparencia, pues resulta que la manera de ocultar los mundos oscuros de estos individuos es vendiendo un discurso de claridad para continuar su marcha por las tinieblas sin remordimiento mientras el público se distrae en la falsa narrativa.
El expresidente de Ecuador Rodrigo Borja, en la Enciclopedia de la Política, señala la cantidad de empresas offshore que hay diseminadas por el mundo, define cómo operan mediante complejos entramados financieros, y sobre ellas informa que “allá van a parar, en cuentas cifradas, los dineros de la droga, de los negocios turbios o de los peculados de gobiernos. O el llamado hot money compuesto por los capitales errantes de carácter especulativo que ingresan o salen de los países de acuerdo con el grado de estabilidad de la moneda local o sus perspectivas de futuro”. Como vemos, el tema es muy sensible y su abordaje espinoso, prohibitivo y hasta pecaminoso, porque quienes están involucrados, como afirman Martínez y Lafuente, son los personajes más influyentes y poderosos del mundo, los que inciden en el trazado de las agendas nacionales y globales.