un momento

Perfume y belleza

Hemos recordado que mayo es el mes de las flores. Ellas nos recuerdan siempre la belleza y el perfume.

Cuando se quiere hacer un regalo, muchas veces se lleva un ramo de flores porque son bellas y destilan perfume.

También la vida nuestra ha de ser como una flor: bella y con buen olor.

A veces se quiere llevar perfume y belleza por vanidad, para aparentar lo que no se es. Pero llevar mal olor en la vida y llevar fealdad es llevar lo malo.

Por eso san Pablo recuerda aquella frase: “somos la fragancia de Cristo”.

El mejor desodorante para una persona es una vida ética, honrada, no corrupta no dañada. Los corruptos son como los muertos: hieden, no tienen buena fragancia.

Hasta mañana,

si Dios, usted y yo lo queremos.