enfoque

El periplo de Sophia

A veces uno buscando algún entretenimiento se detiene a mirar alguna serie o alguna película en la televisión. Y de repente escucha alguna expresión o palabra que le llama la atención. Y esta fue la palabra que nos motivó a buscar su significado, pues no entendí “ni papa” lo que se dijo en ese dialogo.

La periodista Carolina Pichardo cuando conversaba con la robot Sophia durante el Foro Global. Jorge Martínez

La periodista Carolina Pichardo cuando conversaba con la robot Sophia durante el Foro Global. Jorge Martínez

Cuando busqué la palabra periplo entendí finalmente que se trataba de un viaje, de un recorrido que una persona hacía y que luego volvía al inicio del mismo. Y me pareció interesante el proceso. Y es que precisamente cuando hablamos del ciclo de extinción de un paradigma, el nuevo paradigma hace un recorrido, no sin antes destruir el status quo y lograr que todo el mundo vuelva a cero, como lo es el caso de las tecnologías.

Miles de ejemplos se suceden cada cierto tiempo. Y viene entonces la nueva moda o más que una moda, las nuevas aplicaciones, las nuevas funcionalidades de un equipo, hasta que casi todo el mundo utiliza la nueva máquina, la nueva computadora, el nuevo software, el nuevo coche, el nuevo celular, en fin, los avances en la tecnología desplazan agresivamente lo que tenemos hoy como bueno y valido, entonces, rápidamente damos un paso, dejando atrás la formas como pensábamos y actuábamos.

De este proceder, vimos entonces la oportunidad de describir este proceso aplicado no solo a la cotidianidad de la gente, como sin dudas ocurre con el móvil y las comunicaciones a nivel general, sino también aplicado al mundo y las buenas prácticas empresariales.

Parecería que por arte de magia comenzamos a recibir informaciones sobre IA y fue que pulsamos una vez una búsqueda sobre el tema y ahora no paro de recibir información. Y solo hace algunos días, tal vez dos o tres semanas, se produjo en el país un evento en la región este, donde se presentó a la bella Sophia, un robot que ha recorrido ya muchos países, para mostrar las capacidades de la que ha sido dotado, como robot que puede hacer una infinidad de cosas, guiado por los programas que le articulan y basado en “la inteligencia” artificial.

De ahí en lo adelante sin buscarlo, las redes nos lleva información dirigida en casi todos los medios digitales pero sobre todo en la prensa digital internacional, informaciones de primera mano sobre los avances y los peligros de la inteligencia artificial.

Partiendo de esta realidad y conociendo el “ciclo de extinción del paradigma”, entendemos que la Inteligencia Artificial tendrá su propio periplo y por ello hemos denominado este escrito: “El periplo de Sophia”.

Desde esta óptica vemos a Sophia como una representación o tipo de lo que es y seria la inteligencia artificial aplicada, ya que continuarán los desarrollos de aplicaciones, tal cual viene aconteciendo o develándose.

Al parecer los desarrolladores de este tema ya tienen años con estos procesos y al tener algunos prototipos ya probados entonces surge el boom a nivel mundial de robots con inteligencia artificial.

Ya se venía informando y criticando todo el tema de los híbridos, del transhumanismo, de la bioética y de los peligros para la raza humana.

Ya hoy se habla de supuestos avances que implican la probabilidad de:

• Una piel sensitiva para los robots

• Robots que pueden leer el pensamiento de la gente.

• Robots que podrían traer al mundo criaturas in vitro.

• Robots que pueden desplazar miles de actividades cotidianas del hombre en sus diferentes ambientes.

• Robots que pueden realizar una gran cantidad de trabajos de oficina que comúnmente realiza el hombre.

• Robots en las cadenas de montaje y parques industriales

• Robots dirigiendo el transito

• Aviones y drones que vuelan sin piloto y destruyen poblaciones u objetivos militares.

• Robots que aprenden de manera autónoma y toman decisiones de forma “propia”.

• El chiste de un robot que se desmayo por cansancio.

• Robots todos alimentados por paradigmas desconocidos por el ser humano, pero que serían necesariamente sistemáticos.

Cito estos puntos como ejemplos de lo que se viene tejiendo. Dentro de las potencialidades que este nuevo paradigma IA trae está obviamente el incremento de la productividad en el mundo empresarial e industrial.

Estamos hablando de maquinas programadas que realizarían tareas sistematizadas, estandarizadas y que desplazarían como siempre ha ocurrido mano de obra. De hecho se dice que hasta el trabajo remoto desaparecería.

Cada avance en la tecnología ha hecho lo mismo: romper los procesos actuales y sustituirlos por nuevos y más agiles, eficientes, productivos y por ende con menos personal envuelto.

El criterio de la productividad siempre ha sido el mismo: lograr hacer más con menos. Es decir, lograr mayor producción con menos recursos invertidos. Es la lógica de la creación de riquezas.

Sin embargo en el caso de la inteligencia artificial se trata de hacer mucho más con menos o mucho menos. Lo que trae un reto bastante grande a la humanidad.

El mundo y el ambiente empresarial se va a sacudir, los que tengan una mejor estrategia hibrida serán “los nuevos líderes del mercado”, esa será la nueva ventaja competitiva y comparativa. Esto que será una disrupción a escala mundial, se convertirá en una gran amenaza contra la paz y el derecho al trabajo que tienen los hombres.

Decía mi extinto padre el Dr. Rafael Julián Padilla Cordero, en un artículo que escribiera en el año 1967 denominado la Integración Universal: “la tecnología irá a un ritmo tan acelerado, que será posible que un avión dispare un proyectil y que el avión sea alcanzado por el mismo proyectil”.

Y es lo que se teme ocurriría con la inteligencia artificial. El hombre ha creado muy posiblemente a su enemigo mortal y le ha capacitado “para ser invencible”, y aunque parezca una película de ciencia ficción, muy probablemente tendríamos una guerra entre robots y humanos.

La maldad del hombre es la misma desde la caída en el edén. Las características de los sicópatas integrados o no han existido desde antaño, casi siempre adornadas con un deseo de brillo o narcisismo exacerbado.

Ahora vemos al denominado padre de la inteligencia artificial renunciando de google y dedicado a hablar horrores de su propio invento y de los peligros que envuelve. Una doble moral difícilmente de comprar.

Es como dice el dicho: mataste al hombre y ahora quieres pagar su funeral.

¡Seamos más serios!. En el escenario donde millones de personas pierdan su trabajo en el próximo quinquenio, como se viene diciendo en la prensa internacional. Por esto afirmamos que los paradigmas y las buenas prácticas empresariales cambiarán dramáticamente y por supuesto leyes y convenciones internacionales también, echando por tierra la necesidad de proteger al hombre y a combatir ambientes tóxicos, ¿porque?, es sencillo:

• Los robots no chismean

• No tienen emociones

• No están en nomina, no tributan, no están en la seguridad social, no van al médico, no compran ropa, ni van a la disco, para citar algunos ejemplos.

• No tienen enfermedades sicosomáticas

• No les da la andropausia o la menopausia, o la menstruación.

• No piden permiso por la muerte de un familiar.

• Están programados para rendir resultados

• No discuten con sus jefes (si acaso no hay una rebelión robótica, que es posible)

Pero ahí está el detalle, es posible que con la autonomía que se busca en la robótica basada en la inteligencia artificial, se puedan estos rebelar y crear un caos ya incontrolable y siguiendo sus propios designios o la maldad que los programadores y creadores les hayan incluido en esa IA.

Por eso algunos analistas plantean el gran peligro de un holocausto o una guerra nuclear impulsada por decisiones robóticas.

Claro, partiendo de la teoría de sistemas, no es posible que actúen si no existen rutinas o subrutinas debidamente programadas. Aunque se denuncia que tendrían la posibilidad de crear sus propias sub rutinas y seguirlas “a discreción”.

El gran peligro de la automatización es precisamente el paradigma para el bien o para el mal del programador o del analista de sistemas que realizó el diseño y luego su parametrización o set up.

Todavía se tiene la creencia por ejemplo de que el virus del covid fue creado como arma química y fue creado al mismo tiempo que la vacuna. Un negocio redondo y una meta alcanzada de despoblar el globo terráqueo.

Así como esta maldad clarísima a toda prueba, estarían las intenciones robotizadas apoyadas por una inteligencia artificial pero “maligna”.

Caemos en lo básico, ¿que de bueno podría hacer un robot si los programas que le hacen actuar los ha diseñado el mismo Satanás?. ¿Podrían existir logros plausibles para la humanidad?. ¿Podría dar higos un árbol de manzana?.

Pero desmitifiquemos esto, ¿que de bueno para la humanidad puede surgir de Davos o de la ONU o de los malos mayordomos denominados presidentes de países que se reúnen a planificar la destrucción de la humanidad?.

Pero no Teologicemos ahora ni Filosofemos. El caso práctico está claro. Tenemos varios escenarios con algunas variaciones fundamentales que las impone el sentido de bien o de mal que tengan los creadores.

Por eso el fraude del voto automatizado y de los famosos capta huellas en pasadas elecciones, pero en tierra de machepa y papeleta todo queda impune ASIGUN sea el apellido del GATO BAISINO. Viva nuestra democracia y los benditos políticos traidores. Pero este no es el tema, lo siento.

Decíamos que las buenas o nuevas prácticas empresariales se verán impactadas necesariamente por esta locura de la inteligencia artificial. Más adelante usted verá porque es una locura.

El periplo de Sophía no será muy largo, su ciclo de vida luce tener una probabilidad alta de ser limitado o torpedeado por el mismo hombre.

Sería un contra sentido que no surja una nueva variable en la conocida curva del cambio: negación, resistencia, prueba y aceptación. Esta curva podría sería sustituida en el caso de la inteligencia artificial, agregando dos nuevos elementos: negación, resistencia, sabotaje y destrucción.

Aunque el tema es bastante complejo para realizar un análisis completo en una entrega, nos detendremos a destacar los siguientes aspectos, dándole cabida a la realidad judeo cristiana y al pensamiento griego que aun gravita en todo occidente:

• El trabajo en la biblia: el que no trabaja que no coma; el obrero es digno de su salario; siembra tu semilla en la mañana y no dejes de sembrarla en la tarde…

• La convención de los derechos humanos y la OIT

• La constitución de la república y el código de trabajo

• El mobbing como torpedero del derecho al trabajo

• La curva del cambio: etapas y las emociones

• La farsa de la responsabilidad social

• El falso liderazgo totalmente cuestionado en todos los ambientes

• La búsqueda constante de la ventaja competitiva

• La destrucción creativa y el método inductivo.

• La automatización y el enemigo aliado la IA.

• Los ambientes tóxicos y más tóxicos.

• La desaparición del mejor lugar para trabajar

• La sublevación del hombre

• La nueva lucha de clases sociales y neo marxismo

• Surgimiento de una nueva clase gobernante y un nuevo sistema politico

• El fin del periplo de Sophia.

Evidentemente cada uno de estos elementos tiene sus propias características e invitan a una reflexión por separado. Pero será en otro momento que profundizaremos sobre los mismos.

Parece que el plan del nuevo orden mundial y el famoso resteo de la humanidad están amarrados con todos estos temas. Pero la confianza está en que los hombres y mujeres pensantes no se dejaran pisotear por estos impostores que basados en sus codicias e inconsciencias hacia la colectividad pretenden convertir la aldea global en una sociedad esclavizada.

Si la humanidad tiene suerte y los hombres de bien se empoderan, la velocidad de extinción del Periplo de Sophia será muy ágil, aunque lamentablemente por las grandes inversiones realizadas, se insistirá en su implementación y se usaran todas las maniobras y manipulaciones de la comunicación estratégica para hacer creer que la medicina no será peor que la enfermedad.

Julián Padilla

A veces uno buscando algún entretenimiento se detiene a mirar alguna serie o alguna película en la televisión. Y de repente escucha alguna expresión o palabra que le llama la atención. Y esta fue la palabra que nos motivó a buscar su significado, pues no entendí “ni papa” lo que se dijo en ese dialogo.

Cuando busqué la palabra periplo entendí finalmente que se trataba de un viaje, de un recorrido que una persona hacía y que luego volvía al inicio del mismo. Y me pareció interesante el proceso. Y es que precisamente cuando hablamos del ciclo de extinción de un paradigma, el nuevo paradigma hace un recorrido, no sin antes destruir el status quo y lograr que todo el mundo vuelva a cero, como lo es el caso de las tecnologías.

Miles de ejemplos se suceden cada cierto tiempo. Y viene entonces la nueva moda o más que una moda, las nuevas aplicaciones, las nuevas funcionalidades de un equipo, hasta que casi todo el mundo utiliza la nueva máquina, la nueva computadora, el nuevo software, el nuevo coche, el nuevo celular, en fin, los avances en la tecnología desplazan agresivamente lo que tenemos hoy como bueno y valido, entonces, rápidamente damos un paso, dejando atrás la formas como pensábamos y actuábamos.

De este proceder, vimos entonces la oportunidad de describir este proceso aplicado no solo a la cotidianidad de la gente, como sin dudas ocurre con el móvil y las comunicaciones a nivel general, sino también aplicado al mundo y las buenas prácticas empresariales.

Parecería que por arte de magia comenzamos a recibir informaciones sobre IA y fue que pulsamos una vez una búsqueda sobre el tema y ahora no paro de recibir información. Y solo hace algunos días, tal vez dos o tres semanas, se produjo en el país un evento en la región este, donde se presentó a la bella Sophia, un robot que ha recorrido ya muchos países, para mostrar las capacidades de la que ha sido dotado, como robot que puede hacer una infinidad de cosas, guiado por los programas que le articulan y basado en “la inteligencia” artificial.

De ahí en lo adelante sin buscarlo, las redes nos lleva información dirigida en casi todos los medios digitales pero sobre todo en la prensa digital internacional, informaciones de primera mano sobre los avances y los peligros de la inteligencia artificial.

Partiendo de esta realidad y conociendo el “ciclo de extinción del paradigma”, entendemos que la Inteligencia Artificial tendrá su propio periplo y por ello hemos denominado este escrito: “El periplo de Sophia”.

Desde esta óptica vemos a Sophia como una representación o tipo de lo que es y seria la inteligencia artificial aplicada, ya que continuarán los desarrollos de aplicaciones, tal cual viene aconteciendo o develándose.

Al parecer los desarrolladores de este tema ya tienen años con estos procesos y al tener algunos prototipos ya probados entonces surge el boom a nivel mundial de robots con inteligencia artificial.

Ya se venía informando y criticando todo el tema de los híbridos, del transhumanismo, de la bioética y de los peligros para la raza humana.

Ya hoy se habla de supuestos avances que implican la probabilidad de:

• Una piel sensitiva para los robots

• Robots que pueden leer el pensamiento de la gente.

• Robots que podrían traer al mundo criaturas in vitro.

• Robots que pueden desplazar miles de actividades cotidianas del hombre en sus diferentes ambientes.

• Robots que pueden realizar una gran cantidad de trabajos de oficina que comúnmente realiza el hombre.

• Robots en las cadenas de montaje y parques industriales

• Robots dirigiendo el transito

• Aviones y drones que vuelan sin piloto y destruyen poblaciones u objetivos militares.

• Robots que aprenden de manera autónoma y toman decisiones de forma “propia”.

• El chiste de un robot que se desmayo por cansancio.

• Robots todos alimentados por paradigmas desconocidos por el ser humano, pero que serían necesariamente sistemáticos.

Cito estos puntos como ejemplos de lo que se viene tejiendo. Dentro de las potencialidades que este nuevo paradigma IA trae está obviamente el incremento de la productividad en el mundo empresarial e industrial.

Estamos hablando de maquinas programadas que realizarían tareas sistematizadas, estandarizadas y que desplazarían como siempre ha ocurrido mano de obra. De hecho se dice que hasta el trabajo remoto desaparecería.

Cada avance en la tecnología ha hecho lo mismo: romper los procesos actuales y sustituirlos por nuevos y más agiles, eficientes, productivos y por ende con menos personal envuelto.

El criterio de la productividad siempre ha sido el mismo: lograr hacer más con menos. Es decir, lograr mayor producción con menos recursos invertidos. Es la lógica de la creación de riquezas.

Sin embargo en el caso de la inteligencia artificial se trata de hacer mucho más con menos o mucho menos. Lo que trae un reto bastante grande a la humanidad.

El mundo y el ambiente empresarial se va a sacudir, los que tengan una mejor estrategia hibrida serán “los nuevos líderes del mercado”, esa será la nueva ventaja competitiva y comparativa. Esto que será una disrupción a escala mundial, se convertirá en una gran amenaza contra la paz y el derecho al trabajo que tienen los hombres.

Decía mi extinto padre el Dr. Rafael Julián Padilla Cordero, en un artículo que escribiera en el año 1967 denominado la Integración Universal: “la tecnología irá a un ritmo tan acelerado, que será posible que un avión dispare un proyectil y que el avión sea alcanzado por el mismo proyectil”.

Y es lo que se teme ocurriría con la inteligencia artificial. El hombre ha creado muy posiblemente a su enemigo mortal y le ha capacitado “para ser invencible”, y aunque parezca una película de ciencia ficción, muy probablemente tendríamos una guerra entre robots y humanos.

La maldad del hombre es la misma desde la caída en el edén. Las características de los sicópatas integrados o no han existido desde antaño, casi siempre adornadas con un deseo de brillo o narcisismo exacerbado.

Ahora vemos al denominado padre de la inteligencia artificial renunciando de google y dedicado a hablar horrores de su propio invento y de los peligros que envuelve. Una doble moral difícilmente de comprar.

Es como dice el dicho: mataste al hombre y ahora quieres pagar su funeral.

¡Seamos más serios!. En el escenario donde millones de personas pierdan su trabajo en el próximo quinquenio, como se viene diciendo en la prensa internacional. Por esto afirmamos que los paradigmas y las buenas prácticas empresariales cambiarán dramáticamente y por supuesto leyes y convenciones internacionales también, echando por tierra la necesidad de proteger al hombre y a combatir ambientes tóxicos, ¿porque?, es sencillo:

• Los robots no chismean

• No tienen emociones

• No están en nomina, no tributan, no están en la seguridad social, no van al médico, no compran ropa, ni van a la disco, para citar algunos ejemplos.

• No tienen enfermedades sicosomáticas

• No les da la andropausia o la menopausia, o la menstruación.

• No piden permiso por la muerte de un familiar.

• Están programados para rendir resultados

• No discuten con sus jefes (si acaso no hay una rebelión robótica, que es posible)

Pero ahí está el detalle, es posible que con la autonomía que se busca en la robótica basada en la inteligencia artificial, se puedan estos rebelar y crear un caos ya incontrolable y siguiendo sus propios designios o la maldad que los programadores y creadores les hayan incluido en esa IA.

Por eso algunos analistas plantean el gran peligro de un holocausto o una guerra nuclear impulsada por decisiones robóticas.

Claro, partiendo de la teoría de sistemas, no es posible que actúen si no existen rutinas o subrutinas debidamente programadas. Aunque se denuncia que tendrían la posibilidad de crear sus propias sub rutinas y seguirlas “a discreción”.

El gran peligro de la automatización es precisamente el paradigma para el bien o para el mal del programador o del analista de sistemas que realizó el diseño y luego su parametrización o set up.

Todavía se tiene la creencia por ejemplo de que el virus del covid fue creado como arma química y fue creado al mismo tiempo que la vacuna. Un negocio redondo y una meta alcanzada de despoblar el globo terráqueo.

Así como esta maldad clarísima a toda prueba, estarían las intenciones robotizadas apoyadas por una inteligencia artificial pero “maligna”.

Caemos en lo básico, ¿que de bueno podría hacer un robot si los programas que le hacen actuar los ha diseñado el mismo Satanás?. ¿Podrían existir logros plausibles para la humanidad?. ¿Podría dar higos un árbol de manzana?.

Pero desmitifiquemos esto, ¿que de bueno para la humanidad puede surgir de Davos o de la ONU o de los malos mayordomos denominados presidentes de países que se reúnen a planificar la destrucción de la humanidad?.

Pero no Teologicemos ahora ni Filosofemos. El caso práctico está claro. Tenemos varios escenarios con algunas variaciones fundamentales que las impone el sentido de bien o de mal que tengan los creadores.

Por eso el fraude del voto automatizado y de los famosos capta huellas en pasadas elecciones, pero en tierra de machepa y papeleta todo queda impune ASIGUN sea el apellido del GATO BAISINO. Viva nuestra democracia y los benditos políticos traidores. Pero este no es el tema, lo siento.

Decíamos que las buenas o nuevas prácticas empresariales se verán impactadas necesariamente por esta locura de la inteligencia artificial. Más adelante usted verá porque es una locura.

El periplo de Sophía no será muy largo, su ciclo de vida luce tener una probabilidad alta de ser limitado o torpedeado por el mismo hombre.

Sería un contra sentido que no surja una nueva variable en la conocida curva del cambio: negación, resistencia, prueba y aceptación. Esta curva podría sería sustituida en el caso de la inteligencia artificial, agregando dos nuevos elementos: negación, resistencia, sabotaje y destrucción.

Aunque el tema es bastante complejo para realizar un análisis completo en una entrega, nos detendremos a destacar los siguientes aspectos, dándole cabida a la realidad judeo cristiana y al pensamiento griego que aun gravita en todo occidente:

• El trabajo en la biblia: el que no trabaja que no coma; el obrero es digno de su salario; siembra tu semilla en la mañana y no dejes de sembrarla en la tarde…

• La convención de los derechos humanos y la OIT

• La constitución de la república y el código de trabajo

• El mobbing como torpedero del derecho al trabajo

• La curva del cambio: etapas y las emociones

• La farsa de la responsabilidad social

• El falso liderazgo totalmente cuestionado en todos los ambientes

• La búsqueda constante de la ventaja competitiva

• La destrucción creativa y el método inductivo.

• La automatización y el enemigo aliado la IA.

• Los ambientes tóxicos y más tóxicos.

• La desaparición del mejor lugar para trabajar

• La sublevación del hombre

• La nueva lucha de clases sociales y neo marxismo

• Surgimiento de una nueva clase gobernante y un nuevo sistema politico

• El fin del periplo de Sophia.

Evidentemente cada uno de estos elementos tiene sus propias características e invitan a una reflexión por separado. Pero será en otro momento que profundizaremos sobre los mismos.

Parece que el plan del nuevo orden mundial y el famoso resteo de la humanidad están amarrados con todos estos temas. Pero la confianza está en que los hombres y mujeres pensantes no se dejaran pisotear por estos impostores que basados en sus codicias e inconsciencias hacia la colectividad pretenden convertir la aldea global en una sociedad esclavizada.

Si la humanidad tiene suerte y los hombres de bien se empoderan, la velocidad de extinción del Periplo de Sophia será muy ágil, aunque lamentablemente por las grandes inversiones realizadas, se insistirá en su implementación y se usaran todas las maniobras y manipulaciones de la comunicación estratégica para hacer creer que la medicina no será peor que la enfermedad.