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POLÍTICA Y CULTURA

Jean Alain, no hagáis “mutis por el foro”

Un grupos de abogados jóvenes del Partido Revolucionario Moderno, ha emplazado a la Procuraduría General de la República, mediante Acto de Alguacil, abstenerse de intervenir llamada telefónicas de dirigentes del Partido Revolucionario Moderno, sobre los que no existe ninguna investigación penal en curso, por lo que no debe autorizarse la interceptación de números de teléfonos.

La notificación fue hecha también mediante acto de alguacil al presidente de la Suprema Corte de Justicia (SCJ), al Instituto Dominicano de Telecomunicaciones (Indotel), y a los jueces coordinadores de los juzgados de instrucción del Distrito Nacional y la provincia Santo Domingo, así como a las empresas telefónicas Claro Dominicana, Altice Dominicana y Viva Dominicana.

El requerimiento hecho por los abogados Sigmund Freud, Antoliano Peralta, Luis Soto, Julio Peña Guzmán y Efrén Cuello, advierte, que la Procuraduría General de la República “se ha dado a la tarea” de intervenir los teléfonos de dirigentes políticos de la oposición solicitando “irregularmente” a los jueces coordinadores de los juzgados de instrucción, autorización para la intervención de sus teléfonos, incluyéndolos en listados de supuestos procesos penales que lleva a cabo, identificando los números telefónicos de estos dirigentes con los nombres de los investigados en los referidos procesos.

“En consecuencia se les intima a que se abstengan de solicitar, autorizar o ejecutar cualquier procedimiento de intervención telefónica contra las personas previamente enumeradas; advirtiéndoles que de no obtemperar al presente requerimiento, mi requirente procederá a reclamar sus derechos por todas las vías judiciales nacionales e internacionales, incluyendo las vías penales que la ley pone a su disposición”.

Una acusación tan grave habría provocado en cualquier país civilizado del planeta, con instituciones fuertes y funcionarios aptos, una investigación inmediata y una respuesta convincente, correctiva y apaciguadora del clima suscitado por la denuncia implícita en dicho Acto de Alguacil.

El señor Procurador General de la República, Jean Alain Rodríguez, ha hecho “mutis por el foro”, que para fines de cultura general, significa, como expresión teatral, salir de escena, o escurrir el bulto de sus responsabilidades. La directora de comunicación de la PGR, dijo, según la prensa matutina, no tener conocimiento de la información susodicha. Algo inaudito.

El Prof. Juan Bosch insistió siempre, hablando de República Dominicana, en su condición de país subdesarrollado, carente de instituciones fuertes, ausente de una tradición constitucional vigorosa y estable, que los mayores atropellos y violaciones a los códigos jurídicos y a la Carta Magna, procedían de grupos alzados en la poltrona de las instituciones del propio Estado. En su caso, tratándose de un funcionario relativamente joven, es de esperarse que preste la debida atención a este Acto de Alguacil, sometido por abogados altamente capacitados y actualizados, cuyo cumplimiento del deber trasciende la efímera y volátil estancia de los cargos públicos, donde un día no muy lejano, se podrá llegar por méritos y logros acumulados en la carrera.

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