Manejo básico en la mesa para parecer expertos

Compartir con amigos un desayuno, almuerzo o cena es algo muy grato. Son momentos especiales que fortalecen la amistad y que la mantienen unida, no importando distancia o si nos vemos con frecuencia o no. Hay veces que tenemos el compromiso de representar la empresa en la que laboramos, y ahí hay más formalidad, pues somos la imagen de la misma.

Manejarnos correctamente en la mesa es algo que nos preocupa, más cuando encontramos en ella una serie de cubiertos, copas y platos que no manejamos.

Yo diría, en mi experiencia, que el objetivo de todas las etiquetas sobre la forma de comportarse en la mesa, se resume en "ser prácticos".

Recuerdo siempre unos consejos de mi querida doña Antonia Vázquez de Freites (Educadora de las buenas maneras, la etiqueta y el protocolo social, diplomática) de quien tuve el privilegio y el honor de tomar algunas de sus experiencias en el mundo del protocolo, siendo uno de sus alumnos: Debes cuidar el comportamiento en la mesa y el buen manejo de todo en ella. El mundo cambia, las costumbres cambian, pero hay valores humanos que no cambian.

Cuando recibimos una invitación para compartir en la mesa debemos tener en cuenta algunos puntos en nuestro comportamiento. Hoy día, la etiqueta equivale a las reglas convencionales, al conducirnos, a las costumbres que nos han sido transmitidas, es por esto que debemos hacer hábito desde nuestro hogar de los buenos modales, aplicando las normas para el óptimo comportamiento en la mesa, y el correcto manejo de la cubertería y cristalería.

Es importante que cuidemos los detalles desde el momento en que nos invitan a pasar al comedor. Debemos cerciorarnos de nuestro lugar donde nos hemos de sentar.

Evitemos al sentarnos, caer en la silla. Nunca pasemos los brazos detrás de la silla, muestra pereza. Es de mala impresión balancearos en la silla. Jamás subir los codos sobre la mesa al comer. Manténganoslos junto al cuerpo mientras manejamos los cubiertos.

Por más formal que sea la comida a la que se le ha invitado, usted tiene que compartir con sus compañeros de mesa. Cuidará la forma en que apresura sus bocados, pues jamás hablará mientras come. Mantenga la boca cerrada, hasta que el alimento llegue a sus labios, no la abra con anticipación. Mastique con la boca cerrada, evitando los ruidos. Y nunca bable con la boca llena es muy desagradable.

No te enredes con los cubiertos ni con las copas. Solo verifica el orden en que estén colocados y de acuerdo a la posición estos tendrán su uso. Los tenedores se colocan del lado izquierdo, y del derecho, las cucharas y cuchillos. Se van utilizando según nos sirven el menú, de afuera hacia dentro. En el plano superior del plato los cubiertos de postre, que te indicaran la textura de lo que han de servir.

De la misma manera encontrarás varias copas, las cuales se toman de adentro hacia afuera. La primera es la de agua, que se colocará sobre la punta del primer cuchillo que está a la derecha del plato base. Seguida de la de vino tinto y luego de la del vino blanco. Detrás de esta línea de tres, se colocará la de forma de flauta que será la de la champaña.