De Cerca
Desnudas por la Vida
Muchos ya conocen a mi amiga Francis, me he referido a ella en otras ocasiones y por diversos motivos. Ella, para mí, simboliza la mujer valiente, perseverante, optimista y soñadora, que no le ha entregado a nadie la responsabilidad de su vida y ha sido siempre la protagonista de su historia.
Francis Marizan es madre soltera, artista y sobreviviente de cáncer de mama. Una enfermedad a la que le ha declarado la guerra sin tregua. Por dos ocasiones el destino le trajo esta prueba. Primero, en el 2014 y tuvo que recibir doce quimioterapias preventivas, con todos las consecuencias físicas y emocionales que el proceso implica. Cuando pensábamos que lo peor había pasado, en el 2019 volvió aparecer el cáncer, esta vez más cruel: con metástasis en huesos y pulmones; y derrame pleural en ambos pulmones lo que le provoca un grave dolor. Además, le ha inflamado las cuerdas vocales, por lo que cantar, su gran pasión y medio de ingresos, se ha visto afectada.
Una mujer positiva
Al leer esta descripción cualquiera pensaría que al encontrarla vería una mujer triste y amargada. ¡Pues no! Francis Marizan irradia paz, alegría, vitalidad y esperanza. Ella siempre habla a futuro, pero a futuro lejano, porque es una mujer criada en la fe y está confiada que Dios la ayudará a pasar esta prueba.
Sus redes sociales son una fuente de inspiración para quienes pasan por un proceso similar y necesitan una palabra de estímulo y consuelo. Están llenas de fotografías de momentos hermosos de su carrera de artista y de su vida de madre.
Francis se da permiso para estar triste de vez en cuando y hasta para desahogarse, y es ahí donde le corresponde a su comunidad mimarla. Al día siguiente, despierta la mujer que todos admiramos y amanece agradeciendo a Dios por todas las bendiciones recibidas.
Octubre para reflexionar
A propósito de que el mes de octubre ha sido declarado el mes de la concienciación sobre el cáncer de mama, y esta fecha es aprovechada para resaltar la importancia de hacerse los exámenes para recibir un diagnóstico a tiempo, Francis, como es de esperarse, se une en cuerpo y alma a la causa.
Desde hace varios años ella se dedica a compartir su testimonio en distintas actividades para motivar a otras mujeres a luchar tras un resultado positivo, a orientar sobre los pasos que conlleva cada proceso, y a informar de manera oportuna, porque se ha preparado para eso, para que las mujeres no vean la enfermedad como una sentencia de muerte y sepan que es posible sobrevivir.
Una hermosa acción
Junto a dos de sus amigas que viven situaciones similares, Francis ha creado la campana ‘Desnuda por la vida’, con la finalidad de mostrar su intimidad de forma respetuosa y especial. Lissa, Evelyn y Francis pintaron sus pechos con un elemento que representa algo que las identifica y muestran sus cicatrices como símbolo de su lucha por la vida.
Francis eligió los girasoles, porque es una flor que gira hacia donde está el sol. “Y yo quiero siempre buscar y estar e la luz, no en la oscuridad”, dice al pie de su foto en Instagram.
La iniciativa también resalta el rol de la pareja en este momento difícil y la importancia de ser soporte emocional.
Francis dice que se siente tan mujer como todas aquellas que tienen sus senos, “porque su esencia está en su interior, no en el exterior”.
Y yo me siento inmensamente privilegiada de su amistad y cariño. ¡Dios te bendiga, amiga!
¡Hasta el lunes!