La mina de sal cerrada del gigante petroquímico se derrumba parcialmente en el noreste de Brasil

Un vídeo distribuido por la autoridad muestra un repentino y turbio burbujeo del agua en la laguna de Mundau, en el barrio de Mutange de la ciudad, reflejo de la ruptura de la mina.

El desarrollo no sorprendió a los residentes de Maceió, donde los 40 años de extracción de sal gema de Braskem han provocado el desplazamiento de decenas de miles de personas.

El desarrollo no sorprendió a los residentes de Maceió, donde los 40 años de extracción de sal gema de Braskem han provocado el desplazamiento de decenas de miles de personas.Itawi Alburquerque / AP

Una mina de sal gema cerrada perteneciente al gigante petroquímico brasileño Braskem colapsó parcialmente el domingo en la ciudad costera nororiental de Maceió, dijo la autoridad de defensa civil de la ciudad.

Un vídeo distribuido por la autoridad muestra un repentino y turbio burbujeo del agua en la laguna de Mundau, en el barrio de Mutange de la ciudad, reflejo de la ruptura de la mina.

La zona había sido evacuada previamente y no había riesgo para ninguna persona, dijo la agencia en un comunicado. Citó al alcalde João Henrique Caldas diciendo que se esperaba que la mina se estabilizara luego del colapso parcial.

El desarrollo no sorprendió a los residentes de Maceió, donde los 40 años de extracción de sal gema de Braskem han provocado el desplazamiento de decenas de miles de personas, vaciando comunidades.

La compañía alertó a los funcionarios el 28 de noviembre sobre el riesgo inminente de que la mina colapsara. La tierra alrededor de la mina se había ido hundiendo constantemente desde entonces, cayendo un total de 2,35 metros (7,7 pies) hasta el domingo por la mañana.

El 30 de noviembre, el gobernador del estado de Alagoas, Paulo Dantas, advirtió sobre la posible “formación de grandes cráteres” tras el colapso de la mina y dijo que equipos federales llegarían esa noche como respaldo.

A los residentes locales se les dijo que no se acercaran a la zona y esperaron ansiosamente, imaginando los daños que un derrumbe traería a sus hogares y al resto de la ciudad.

En los primeros días después de su advertencia, Braskem envió actualizaciones periódicas, incluyendo posibles momentos en que la mina podría colapsar. Los mensajes asustaron a los residentes locales, incluido Carlos Eduardo da Silva Lopes, estudiante de la Universidad Federal de Alagaos.

“Esto provocó que la población estuviera aterrorizada, sin poder dormir, preocupada”, dijo Lopes a The Associated Press por teléfono el 1 de diciembre.

La minería de sal de roca es un proceso de extracción de sal de depósitos subterráneos profundos. Una vez que se ha extraído la sal, las cavidades que quedan pueden colapsar, provocando que el suelo de arriba se asiente. Las estructuras construidas sobre dichas áreas pueden caerse.

Entre 1979 y 2019, cuando Braskem anunció el cierre de sus operaciones de sal gema en Maceió, la empresa operó un total de 35 minas.

Los problemas en Maceió comenzaron un año antes, cuando aparecieron por primera vez grandes grietas en la superficie. Algunas se extendían por varios cientos de metros (yardas). La primera orden de evacuar algunas zonas, incluidas partes del barrio de Mutange, llegó en 2019.

Desde entonces, cinco barrios se han convertido en pueblos fantasmas cuando los residentes aceptaron los pagos de Braskem para reubicarse. Según el sitio web del Senado brasileño, unas 200.000 personas en Maceió se vieron afectadas por las actividades mineras de la empresa.

En julio, la empresa llegó a un acuerdo de 356 millones de dólares con la ciudad costera.

“Seguiremos luchando y exigiendo responsabilidad a Braskem, que es la gran responsable de estos daños”, afirmó el alcalde en un comunicado del domingo de la autoridad de defensa civil.

Además de la mina 18, que colapsó parcialmente el domingo, Braskem ha dicho que está en proceso de llenar otras ocho cavidades con arena.

Braskem es una de las empresas petroquímicas más grandes de América, propiedad principalmente de la petrolera estatal brasileña Petrobras y del gigante de la construcción Novonor, antes conocido como Odebrecht.

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