Estados Unidos implementará programas pilotos en el país
Estos serán parte de una estrategia anti-corrupción
República Dominicana fue mencionada en la Estrategia de Estados Unidos sobre Lucha contra la Corrupción, donde esta se establece como un interés fundamental para la seguridad nacional estadounidense.
De diciembre 2021 y suscrito por la Casa Blanca, el documento define la corrupción como una “amenaza fundamental” para el estado de derecho que “corroe” la confianza pública y alimenta el “cinismo popular” hacia una gobernanza eficaz.
En cuanto a República Dominicana, la Estrategia menciona que con el objetivo de “mejorar la coordinación y el análisis de riesgos en asistencia exterior”, implementará programas piloto como una “prueba de concepto” para determinar las mejores prácticas para la futura colaboración interinstitucional.
Estos programas pilotos también se realizarán para examinar el uso de la ayuda extranjera para combatir la corrupción, y perseguir la innovación, la experimentación, la adaptación y la reflexión sobre los enfoques existentes.
Para realizar la misión la Agencia de EE. UU. para el Desarrollo Internacional (Usaid, por sus siglas en inglés) ha dispuesto de fondos para explorar modelos de análisis, diseño y programación en colaboración con agentes interagenciales estadounidenses.
Este documento se publica días antes de la Cumbre por la Democracia que se realizará del 9 al 10 de diciembre.
La cumbre, que se desarrollará de manera virtual, fue convocada por el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, el 11 de agosto pasado y se centrará en los desafíos y oportunidades que enfrentan las democracias y “proporcionará una plataforma para que los líderes asuman compromisos para defender la democracia y los derechos humanos en el país y en el extranjero”.
¿Qué busca la estrategia?
La estrategia se creó luego de que Biden, estableciera el 3 de junio de este año la lucha contra la corrupción como un tema de interés.
Entonces tras escribir el Primer Memorando del Estudio de Seguridad Nacional (NSSM-1, por sus siglas en inglés), departamentos y agencias federales de EEUU realizaron una revisión interinstitucional para “identificar y tratar de rectificar brechas persistentes en la lucha contra la corrupción”.
Esta estrategia establece cómo EEUU prevendrá, limitará y responderá a los delitos de corrupción a nivel nacional e internacional.