La principal radiotelevisión de Haití deja de emitir por falta de combustible

Los oyentes que este lunes trataban de sintonizar la emisora se encontraban con un ruido constante

La gente hace fila con bidones vacíos en una gasolinera de Puerto Príncipe, Haití, el 1 de noviembre de 2021. Quienes pueden pagarlo dependen de generadores costosos, que no son de ayuda ante la grave escasez de combustible causada por las pandillas, quienes han estado bloqueando el acceso a las terminales petroleras del país en la capital y sus alrededores, con el gobierno bajo presión para garantizar la seguridad de las empresas para llegar a las instalaciones de almacenamiento cruciales.
Richard PIERRIN / AFP

La gente hace fila con bidones vacíos en una gasolinera de Puerto Príncipe, Haití, el 1 de noviembre de 2021. Quienes pueden pagarlo dependen de generadores costosos, que no son de ayuda ante la grave escasez de combustible causada por las pandillas, quienes han estado bloqueando el acceso a las terminales petroleras del país en la capital y sus alrededores, con el gobierno bajo presión para garantizar la seguridad de las empresas para llegar a las instalaciones de almacenamiento cruciales. Richard PIERRIN / AFP

Radio Télévision Caraïbe, grupo que controla la radio y la televisión líderes en audiencia en Haití, cesó sus emisiones este lunes debido a la falta de combustible, en medio de la crisis de desabastecimiento que afecta a todo el país.

Los oyentes que este lunes trataban de sintonizar la emisora se encontraban con un ruido constante, situación parecida a la de la televisión, que ha tenido que parar sus emisiones.

Este medio de comunicación, al igual que muchas empresas, generan su propia electricidad con plantas de gasóleo y han tenido dificultades para abastecerse debido al bloqueo de la distribución de combustible que ejercen desde hace semanas las bandas armadas.

Escuelas, hospitales, medios de comunicación, bancos y empresas privadas han anunciado la reducción de su horario de servicio debido a la escasez de combustible.

Muchos hogares también están sin luz, por depender de generadores de gasóleo, mientras que el precio de los transportes público y privado se han disparado.

El desabastecimiento persiste a pesar de que, desde la semana pasada, la Policía escolta a los camiones cisterna para permitirles distribuir el carburante a los hospitales y a las gasolineras.

En las estaciones de servicio a donde llega el suministro se han formado aglomeraciones y largas filas, en las que la gente incluso pasa la noche para conseguir un galón de carburante.

El motivo del desabastecimiento es la acción de los grupos armados, que secuestran, atacan y amenazan a los transportistas y obstruyen el paso en las avenidas que conducen al puerto de Puerto Príncipe, donde se encuentran los principales almacenes de la ciudad.

La violencia de las bandas armadas se ha incrementado aprovechando la inestabilidad causada por el asesinato del presidente Jovenel Moise, perpetrado el pasado 7 de julio.

El G9 Fanmi e Alye, EL mayor conglomerado de bandas armadas de Haití, está tratando de forzar la dimisión del primer ministro haitiano, Ariel Henry, como condición para permitir la distribución de combustible.