Kenia prohíbe un documental sobre el amor de una pareja de homosexuales
El Consejo de Clasificación de Películas de Kenia (KFCB, en sus siglas inglesas) prohibió hoy la proyección en el país del documental "I am Samuel" ("Yo soy samuel"), que trata la historia de amor de una pareja de homosexuales.
En un comunicado, el regulador, que vigila el contenido de los filmes para que sea acorde con la "cultura, valores y aspiraciones nacionales", señaló que queda prohibida la "exhibición, distribución, posesión o retransmisión" de la cinta en Kenia.
"I am Samuel", del director keniano Peter Murimi, se presentó el año pasado en varios certámenes internacionales, como el Festival de Cine de Londres, con un notable éxito de crítica.
La cinta narra la historia de Sam, un joven que crece en el mundo rural y tradicional de Kenia y que, tras mudarse a la capital, Nairobi, en busca de trabajo y una nueva vida, se enamora de Álex, una relación que florece pese a las amenazas y el rechazo social.
Sin embargo, la KFCB calificó la película de "blasfema" y dijo percibir en ella un "intento claro y deliberado" de "promover el matrimonio del mismo sexo como una forma de vida aceptable".
"Este intento es evidente a través de las repetidas confesiones de la pareja gai de que lo que sienten el uno por el otro es normal y debe ser adoptado como una forma de vida, así como el lenguaje corporal de los personajes, incluidas escenas de besos de dos amantes masculinos", argumentó el regulador.
La cinta, remarcó, intenta también "influir en el espectador para que crea que la generación mayor que alguna vez estuvo en contra de (la comunidad) LGBTQ+ (lesbianas, gais, bisexuales, transgénero y queer) está aceptando lentamente la práctica y el matrimonio entre personas del mismo sexo como una forma de vida normal".
"El documental es, por tanto, inaceptable y una afrenta a nuestra cultura e identidad", concluyó el KFCB.
La homosexualidad se considera un tema tabú en África, donde homosexuales y lesbianas sufren discriminación, persecución y violencia.
En Kenia, las relaciones homosexuales constituyen un delito punible con hasta catorce años de prisión.
De hecho, el Tribunal Superior de Nairobi declaró en mayo de 2019 constitucionales los artículos del Código Penal de Kenia que criminalizan las relaciones homosexuales, en respuesta a un recurso presentado contra esos artículos.
En 2018, el presidente de Kenia, Uhuru Kenyatta, declaró en una entrevista con la cadena estadounidense CNN que los derechos de lesbianas, gais, transexuales, bisexuales e intersexuales (LGTBI) es un tema "sin relevancia" en el país.
Kenyatta enfatizó que "no es cuestión de derechos humanos", sino un asunto que concierne como cultura y que, según él, rechaza la sociedad keniana.