Dirigentes llaman a acelerar adaptación a los efectos del cambio climático
Unos 50 dirigentes internacionales llamaron este lunes a la comunidad mundial a acelerar la preparación ante las consecuencias del cambio climático, y recordaron que sus efectos más intensos ya están presentes.
Esos efectos "pondrán a las personas, las comunidades y la economía mundial en peligro como nunca antes, y traerán nuevas y mayores amenazas a la biodiversidad y la salud", advirtió en un comunicado el Centro Mundial para la Adaptación (GCA).
La GCA es una organización internacional fundada en 2018 para acelerar la adaptación del mundo a los efectos del cambio climático, y la preside el diplomático coreano Ban Ki-Moon, exsecretario general de la ONU.
La adaptación, que incluye sistemas avanzados de alerta, preparación de infraestructuras y mejoras agrícolas, no ha recibido la misma atención, recursos o nivel de acción en el terreno que la reducción de emisiones de gases causantes del calentamiento global, según la GCA.
Unos 50 responsables políticos y especialistas climáticos y de desarrollo se congregaron este lunes para un diálogo junto a Ban y la directora general del FMI, Kristalina Georgieva, con motivo de la inauguración de la sede del GCA en Róterdam.
Los participantes, entre ellos ministros, alcaldes, jefes de organizaciones internacionales y de bancos de desarrollo, reseñaron en un comunicado las medidas que a su juicio deben salir de la conferencia mundial sobre el clima (COP 26) de Glasgow, Escocia, en noviembre.
Citaron la revisión de planes de adaptación para los cuales la ONU se comprometió a destinar 100.000 millones de dólares anuales.
"Los países están listos para una nueva ambición en materia de adaptación, y están igualmente listos para un financiamiento a gran escala para la adaptación", declaró Ban Ki-Moon.
Un informe reciente del Grupo de Expertos Intergubernamentales sobre la Evolución del Clima (GIEC) advirtió que un agravamiento de los impactos climáticos ocurrirá una década antes de lo previsto.
El mundo ya enfrentó este año eventos climáticos extremos, como quemas espectaculares en Grecia y Turquía, incendios forestales en Siberia y California, hambruna en Madagascar, inundaciones en China y Alemania, una de ola de calor histórica en Canadá y más.