Un día entre Cap Cana y PuntaCana

‘¿Quieres ir a Cap Cana? Están celebrando un torneo de disco volador’. ¡Pues sí!, respondo a mi hijo Ángel quien, con su media naranja Rossy, me lleva por unos días a su casa en PuntaCana. Entrada la mañana del sábado 2 de diciembre nos desplazamos hasta el inmenso complejo turístico Cap Cana donde, en esa fecha, dan el picazo de la que será la Casa de Fútbol ONE, de la Confederación de Fútbol de la Asociación del Norte, Centroamérica y el Caribe, una de las seis federaciones que integran la FIFA.

Con el GPS llegamos hasta el área de Los Establos, en cuyo entorno se celebra la competencia de disco volador. Estacionado el auto nos dirigimos hacia el conjunto de restaurante y tienda de souvenirs, donde una pequeña cascada refresca la tórrida temperatura. Con un sol agobiante es imposible acercarme a mirar juego alguno. Sólo veo de lejos a los jóvenes que han echado de lado el calor. En este Torneo Panamericano del Disco Volador, organizado por World Flying Disc Federation y Cut Cam, ‘se inscribieron 1,883 atletas, de 14 países de este lado del mundo. Compitieron durante cinco días en seis categorías.’, nos dice Rafael Cordero.

Al retornar hacia el vehículo nos encontramos con dos grupos de jóvenes atletas que caminan casi en fila india. Cada grupo entona una canción. Parece ser una canción representativa de sus respectivos países. Antes de salir del complejo turístico, Ángel me muestra Sanctuary Town. Es un grupo de varios restaurantes, a los que puede acceder un cliente sin tener que estar hospedado en el lujoso hotel Sanctuary. El guardián nos informa que están cerrados, pero abren a la noche.

Bazar de PuntaCana

Al mediodía estamos en Galerías PuntaCana, donde en la trattoria Mamma Luisa almuerzo una deliciosa ensalada de rúcula, nueces, pollo y queso. Al rato me dedico a mirar los diferentes puestos del bazar navideño que cada año se celebra en este centro comercial. En la plaza que divide un área de otra me llama la atención una artesana.

Es Carolina López. Hace un servilletero utilizando lirios de agua. A mi pregunta responde: ‘Hemos venido seis mujeres del grupo Arte Canas. Nos apoya la Fundación PuntaCana’. Orgullosa afirma que, con su trabajo, ‘ayudamos a limpiar el ambiente’. (El lirio de agua es una planta perjudicial que, entre otras cosas, reduce el oxígeno en los cuerpos de agua).

Variedad

En el bazar navideño de PuntaCana la variedad de artículos incluía el puesto tradicional de cerámica con el tema de peces, adornos en distintos materiales, trajes, carteras, dulces...