El privilegio de estar aquí y ahora

Estar aquí representa existir; pero no necesariamente vivir. .Vivir es darle calidad a la vida, como modo de existir con un propósito real de existencia.

Pareciera un juego de palabras que nos aturde. Sin embargo, quiérase o no, todos venimos a la vida a desarrollar un plan previamente concebido en planos internos de la conciencia. Y lo desbaratamos, cuando sin respeto a la vida, la nuestra y la del otro, menospreciamos la esencia vital que nos nutre, dándonos impulso para alcanzar los retos propuestos en nuestro desarrollo. 

Menospreciamos estar aquí, con ínfulas de grandeza y de creernos por color, clase o raza, mejores o más importantes que aquellos que en pobreza social se descarnan, buscando mejores oportunidades; pero en consecuencia, obviamos la pobreza del alma, de aquel que se hace indiferente, y vuelve la cabeza para ignorarles.

En fin, y en una síntesis simple, estar aquí es para adquirir el conocimiento a través de disciplinas espirituales, domésticas, humanas y sociales, que nos hagan entes idóneos, comprensivos, y mismo, trabajar en cooperación para hacer de las familias núcleos sólidos que propendan a la paz, sin marginación social, ya que la sociedad devuelve lo mismo que recibe de sus miembros y de su infraestructura conductual y de sentimientos.

Estar aquí y ahora, donde la conciencia ha alcanzado un grado de desarrollo, es un privilegio, una gran oportunidad de lograr todo lo propuesto como sueño, y como verdadera práctica, amar y servir al prójimo.