La berenjena en diferentes versiones

La berenjena es una planta comestible que pertenece a la familia de las solanáceas. Tiene una piel de color morado brillante debido al gran contenido de antocianinas. Tiene la carne ligeramente amarga es de color crema con una textura esponjosa.

Proviene de la parte noreste de la India, Birmania y China, y fue clasificada por el famoso botánico sueco Carlos Linneo como Solanum melongena.

La chef Devaki Pratt explica que se utiliza en una amplia variedad de platos dentro de la gastronomía para bocadillos como picadera, guarnición y en ocasiones como plato fuerte. Ya sea rellena, asada, guisada, a la parrilla, horneada, frita, hervida, rebozada o encurtida al ser versátil y nutritiva.

“Con este producto pueden hacerse rollitos, rellenos, parmesano, albóndigas, croquetas, mermelada, cremas, lasaña, quiche, ensaladas, chips, pastel, pizza, hamburguesa, entre otras”, comenta. Estos platos son ideales para estos tiempos de Cuaresma, en los que algunos se abstienen de consumir carne.

Beneficios Según Pratt, la berenjena es rica en potasio, cobre, ácido fólico, magnesio y fibra al contener flavonoides y fenoles, tales como el ácido cafeico y el ácido clorogénico, que tienen grandes propiedades para combatir el cáncer, los virus, el daño de las células del organismo y las bacterias nocivas.

Propiedades curativas Previene enfermedades cardíacas, mejora la circulación, es un gran diurético por su aporte de agua, elimina toxinas del organismo, regula el tránsito intestinal, es desintoxicante natural, protege contra algunos tipos de cáncer y es beneficiosa para las embarazadas, por su ácido fólico.

• 1 cebolla grande picada fina.

• 2 dientes de ajo picados.

• 2 tomates grandes.

• 1 cucharada de mantequilla.

• Sal y pimienta al gusto.

Preparación 1. Lavar las berenjenas, desechar los cabos y cortar en cubos.

2. Colocar en un colador, espolvorear con sal y reposar por 20 minutos.

3. Escurrir y aclarar. Cocer al vapor hasta estar blandas.

4. Retirar y dejar en reposo.

5. Lavar los tomates y pasar por agua hirviendo durante un minuto.

6. Luego pasar por agua fría para retirarles la piel. Machacarlos con tenedor hasta hacer un puré.

7. Colocar la mantequilla en una cacerola y calentar para que se derrita. Añadir la cebolla y el ajo y cocinar hasta que esté transparente.

8. Agregar las berenjenas, el puré de tomate y salpimentar.

Mezclar y continuar la cocción durante unos minutos.