Política

Leonel: Las luces de Balaguer pesan más que sus sombras; Bosch es insuperable

El expresidente analizó a sus pasados homólogos, Juan Bosch y Joaquín Balaguer

Leonel Fernández

Leonel FernándezJosé Alberto Maldonado

“Yo tengo admiración por el doctor Balaguer. Yo pienso que el doctor Joaquín Balaguer es una leyenda”.

Leonel Fernández reconoce que la valoración que hoy hace del expresidente Joaquín Balaguer es muy diferente a la que tenía en su primer año de derecho en la Universidad Autónoma de Santo Domingo.

Ahora lo ve como una leyenda por tratarse de un hombre “con una erudición enciclopédica”.

“Cuando usted se lee los discursos de Balaguer y se lee los textos de Balaguer usted se da cuenta que está en presencia de un talento superior, no cabe duda”, explica.

Antes ya había advertido que durante “los 12 de años de Balaguer”, el periodo histórico que va entre 1966 al 1978, hubo desarrollo pero sin democracia.

“Políticamente la historia lo juzgará, como nos va a juzgar a todos… yo al día de hoy diría que sus luces pesan más que sus sombras. Esa es mi forma de entenderlo. Claro, lo entiendo hoy día mejor que cuando empecé mi primer semestre de estudiante en la UASD”, comenta en su participación en el Desayuno del Listín, al que acudió el lunes para pasar balance a la actualidad nacional y como previa a las elecciones municipales del 18 de febrero venidero.

A Fernández se le preguntó si pretendía parecerse al expresidente Balaguer en sus discursos o en su tradicional forma de vestir. Ambas las descarta.

“Son tiempos históricos distintos, somos personalidades distintas, acuérdese también que yo me formé a la sombra de Juan Bosch, que es otra personalidad diferente a la suya. Juan Bosch, para mí, es la personalidad analítica más aguda que ha dado la República Dominicana en toda su historia.

Es decir, Balaguer era lírico, poético, extraordinario expositor, orador de clásicos de griegos y romanos, pero a la hora del análisis interdisciplinario, enfoque internacional, nacional, profético; Juan Bosch es insuperable.

Doña Yolanda, que siempre fue muy política, decía: miren, ustedes los jóvenes no valoran bien a Balaguer, pero Joaquín Balaguer sin duda alguna que tiene la preparación, la experiencia, el talento y el temperamento para lidiar con los problemas de este país”.

Fernández, tres veces presidente del país, valora la capacidad de su mentor Juan Bosch al punto de decir que era capaz de decidir escribir un artículo para “Vanguardia del Pueblo” o la revista “Política, teoría y acción” en 180 líneas, con 25 palabras por línea, hacer el cálculo de cómo iba a proceder, sentarse, redactar y entregarlo de forma exacta casi como si se tratara de un cálculo matemático.

Desarrollo y democracia

El expresidente Leonel Fernández marca los gobiernos del PRD, entre los años 1978 – 1986, como unos con democracia pero sin desarrollo. Se refiere al gobierno de don Antonio Guzmán, que cortó los tres cuatrienios seguidos de Balaguer y luego al de Salvador Jorge Blanco.

“Los 12 años de Balaguer fueron desarrollo sin democracia; los ocho del PRD fueron democracia sin desarrollo y por eso volvió Balaguer y nosotros fuimos Democracia y Desarrollo”, analiza.

En su juicio, la primera generación que combina en la historia dominicana la democracia con desarrollo es la suya, a partir del 1996 cuando asumió el poder con 42 años junto al Partido de la Liberación Dominicana. “Ahora, insisto, se aceleró el proceso. Y ese proceso se aceleró y es lo que vemos en las construcciones, ya de rascacielos. Ese proceso de urbanización, esa expansión de clase media que ustedes ven los supermercados en todos los pueblos…”