Enterarse del último aliento de su hijo, robó los suspiros de una madre que murió de dolor

Ver partir un hijo es uno de esos golpes en el alma de los que no cualquiera se recupera, y Gloria Rubio Medina se convirtió en un ejemplo de ello cuando en horas de la mañana de este miércoles pesó en boca de uno de sus hijos la noticia de su deceso.

Tanto Gloria, como todo el país, se enteró de que la señora de 92 años de edad había perdido a su hijo, Julio Peña Rubio, el pasado miércoles 18 de noviembre cuando, tras varios días de ser declarado como desaparecido, el cuerpo del mismo fue encontrado a orillas del río Ozama.

La trama del final de Julio, un adulto de 62 años hermano de Pedro Peña Rubio, exgobernador de la provincia de Barahona, parece acarrear una supuesta persecución delictiva detrás que también arrastró consigo a su progenitora que falleció ayer martes a las 11:45 de la noche.

Víctimas de la delincuencia

Para la familia Peña Rubio, han sido días difíciles desde que el fenecido Julio Peña salió desde Barahona hasta Santo Domingo con intención de cuidar se su antecesora que se encontraba delicada de salud en su residencia en “Los Mameyes”.

Aparentemente, estando en la capital, Peña cayó en las redes de unos delincuentes quienes a través de un perfil falso de redes sociales lo hicieron llegar hasta el sector “El Tamarindo'' en Santo Domingo Este, donde supuestamente fue secuestrado y asesinado por sus persecutores.

Su cuerpo fue encontrado el pasado miércoles, tres días después de que Pedro Peña denunciara la desaparición de su hermano.

A menos de una semana, el homicidio del que todavía se desconocen los motivos o la realidad de cómo ocurrieron los hechos alcanzó la vida de una segunda víctima del apogeo de la delincuencia en la que no se pensó cuando a Julio le fue arrancado el aliento… su madre. Según el exgobernador barahonero, su mamá murió anoche en la clínica Abel González, de la capital, tras no haber podido lidiar con el peso de la muerte de su hijo.