SNS a empleados que exigen pagos: “Tenemos prestaciones pendientes desde el año pasado”

“Ustedes son 206 personas y yo tengo prestaciones que van en cola desde el año pasado y han ido siendo despachadas”

Foto: Raul Asencio.

Foto: Raul Asencio.

Una comitiva representante de 206 personas que laboraban para el Servicio Nacional de Salud (SNS), y que en el pasado abril fueron desvinculados, se presentó este lunes frente a las instalaciones de la institución exigiendo el pago de sus prestaciones.

Tras siete meses de haberlos desligado de la empresa los trabajadores, que expresaron haber servido entre 20 y 30 años, indicaron que desde que recibieron su carta de despido el SNS no ha hecho más que “darles largas” para no entregarles la remuneración establecida por la ley.

Por su parte la coordinadora de gestión presupuestaria de la entidad, Silvia Guzmán, habló con los protestantes, asegurándoles que el pago de prestaciones es un proceso que debe ser agotado, indicando que como ese grupo hay cientos de personas en esa situación.

“Ustedes son 206 personas y yo tengo prestaciones que van en cola desde el año pasado y han ido siendo despachadas. Así como ustedes que son 200, hay más”, indicó Guzmán.

A pesar de intentar mitigar los reclamos, buscando la forma de verificar de que los expedientes de los presentes ya se encontraban en recursos humanos y manifestando que la intención es que el grupo reciba sus pagos “a más tardar a finales del mes que viene”, sus declaraciones no hicieron más que levantar la oleada de queja de quienes aseguran no tener nada que ver con terceros y situaciones personales que no pueden esperar.

“La ley establece 90 días para pagos de prestaciones y yo no puedo darme el lujo, como le pasó a un conocido, que duraron un año y tres meses para pagarle. Yo tengo una condición de salud y el SeNaSa Subsidiado (seguro médico) no me cubre los medicamentos”, alegó una de las presentes.

Asimismo, el grupo dijo que no entendía cómo era posible que una institución desistiera de los servicios de un número tan alto de personas, sin más justificación de que “ya no son requeridos”, y no contará en su presupuesto con los recursos suficientes para pagar sus prestaciones.

“Cuando ustedes desvinculan un personal, se entiende que deben tener previsto el monto para pagar sus prestaciones”, reclamó Dani Cuesto.

Guzmán aseguró que el inconveniente para entregar las remuneraciones no es por falta de dinero, sino que “hay una serie de instituciones involucradas y eso retrasa el proceso”.