Entre el coronavirus y los fondos de pensiones

Con dos discursos persuasivos del presidente Danilo Medina y las medidas dispuestas por el Banco Central frente a la crisis del Covid19, la República Dominicana podría tener la esperanza de que la pandemia no acabará su economía en momentos de recesión mundial.

Medina detalló las medidas que se están tomando que incluyen las puramente sanitarias a cargo del ministerio de Salud y las que se dirigen a paliar la situación de los trabajadores y sectores más desfavorecidos que pueden ser víctimas del desempleo.

En una rueda de prensa ofrecida ayer desde el Banco Central, su gobernador, Héctor Valdez Albizu apeló a la sensatez del sector financiero para reducir las tasas de interés en los préstamos a la población, como se les han reducido a ellos por disposición de la entidad.

Valdez Albizu dijo que el BC ha incrementado de RD$30,000 millones a RD$50,000 millones para que el sector financiero tenga suficiente dinero para prestar al pública y a los sectores productivos, así como que vigila el movimiento de las tasas de interés y de dólares.

El gobernador cree que debido a que en los últimos años la República Dominicana ha fortalecido sus fundamentos macroeconómicos, como país se encuentra mejor preparado que otras economías emergentes para sortear el panorama internacional adverso, caracterizado por una alta incertidumbre debido al potencial impacto del coronavirus sobre la economía mundial.

A finales de febrero en una declaración cuando ya el coronavirus estaba haciendo estragos en otros países, Valdez Albizu advirtió sobre la necesidad de preservar la estabilidad económica, dando seguridad y certidumbre a los agentes privados de forma tal que se mantenga un ambiente propicio para sostener la inversión y el crecimiento, especialmente en un entorno doméstico afectado por el ciclo electoral.

El pasado martes el gobernador Valdez Albizu reveló junto al ministro de Hacienda, Donald Guerrero y al superintendente de Bancos, Luis Armando Asunción, la disposición de rebajar 100 puntos en la tasa de referencia, de 4.50% a 3.50% anual.

También la inyección de RD$52,000 millones del encaje legal del sistema financiero para apoyar los sectores productivos y a los que más han sido afectados por la pandemia como son el turismo y el sector exportador.

Fondos de pensiones Quizás curándose en salud y aferrados a uno de los negocios más rentables del país, la Asociación de Fondos de Pensiones dijo que ante una situación de emergencia como la declarada los fondos de pensiones no deberían utilizarse porque sería destruir en tres meses el patrimonio que en 16 años se ha logrado construir.

La carga de asistir a los trabajadores en el momento de trance que pasa el país, sí podría requerir que se permita a los mayores de 65 años que así lo deseen retirar los fondos que tienen acumulados sin ningún condicionamiento para solventar sus necesidades de alimentos o vitaminas o disponer sus entierros.

Pese a la acogida que ha tenido la posición del presidente Medina y del Banco Central para enfrentar la pandemia, el público y sobre todo los dueños de los fondos de pensiones que son los asalariados, podrían ver como una crueldad bastante bien calculada que al menos los mayores no puedan acceder a fondos que son suyos, no del sector bancario.

La negativa a facilitar los fondos de pensiones al menos a los mayores que los requieran con urgencia, va contra la competitividad que tanto patrocinan sectores empresariales y contra la libertad de tener sus ahorros donde logren mayor rentabilidad y poderlos retirar cuando los necesiten.

Los fondos de pensiones son soportados por la población joven del país, no por los mayores y los ancianos. La disposición de esos fondos para quienes los necesiten en ese rango de clientes no generaría desempleos, inflación o alza en las tasas de interés que no existían antes de la aprobación de la Ley 87-01.

Medina da la cara El presidente pronunció dos discursos, el martes 17 y el miércoles 26 del cursante mes para explicar las medidas a tomar frente a la calamidad mundial y para levantar el ánimo del país. Dijo que el gobierno dispone de RD$32 millones para garantizar alimentos y salarios.

Con su apelación para que la gente se quede en sus casas, una recomendación de los científicos a nivel mundial para enfrentar la pandemia, el mandatario lanzó un paquete de subsidios que incluyen la eliminación del pago mínimo mensual sobre las deudas de las tarjetas de crédito. Apeló a que la gente respete el toque de queda que amplió desde anoche.

También ordenó que el Banco de Reservas baje la tasa de interés al consumo con tarjeta de crédito al 1% mensual y que a partir del 1 de abril las 811,000 familias que poseen la tarjeta Solidaridad y que reciben en promedio 1,500 pesos mensuales, tendrán un aumento por los próximos dos meses del componente "comer es primero" de 5,000 pesos mensuales para alimentos.

Medina también dispuso el pago de las pruebas del coronavirus para los mayores de 59 años o los que tengan enfermedades anteriores cuya condición podría agravarse, así como que se rentaran dos clínicas privadas para atender a los pacientes de la pandemia.

Aunque en general la oposición particularmente el candidato presidencial Luis Abinader han acogido bien las medidas oficiales y han ofrecido ayuda, a otros adversarios del oficialismo y al público en general, el ministro de Salud, Rafael Sánchez Cárdenas le dijo que las compras por la presente emergencia se harán con toda transparencia.

Medina da la cara a la enfermedad como no lo han hecho otros gobernantes a cinco meses y medio de entregar el poder al gobernante que sea elegido a mitad de mayo. Su colega, Donald Trump negó en principio el potencial de la enfermedad que actualmente ha arrodillado a Nueva York, a New Orleans y otras ciudades del país.

The New York Times, un crítico del manejo que algunos gobernantes han dado a la pandemia dijo el jueves que el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro encara la crisis del coronavirus como una crisis política y un choque económico en ciernes.

Dentro de la situación agobiante que vive los Estados Unidos, el presidente Trump provocó la carcajada del país al lanzar la premonición de que la economía estaría abierta para el día de Resurrección, cuando los templos se llenarán de fieles y el país volverá a reverdecer. Mientras tanto el gobernante apoyó al Congreso en ofrecer 2 trillones de dólares para repartir a los contribuyentes necesitados.

Del gobernante mexicano, Andrés Manuel López Obrador hay una cascada de críticas en su país porque no favorece la política de "alejamiento social" expresando públicamente dudas de que se avecina una catástrofe para su país de 130 millones de personas.