Profamilia esboza efectos del matrimonio infantil

Profamilia insiste en aumento de edad mínima para matrimonio o la unión, especialmente en caso de niñas y adolescentes.

Profamilia insiste en aumento de edad mínima para matrimonio o la unión, especialmente en caso de niñas y adolescentes.

Profamilia expresó ayer su apoyo a las organizaciones nacionales que abogan por la revisión del Código Civil, para que se aumente la edad mínima para contraer matrimonio o para la unión, especialmente en el caso de las niñas y adolescentes.

La entidad considera el matrimonio infantil y las uniones tempranas como un problema social, de salud y económico, en el que las más afectadas son las niñas y las adolescentes, y las relaciones de poder aumentan la inequidad de género, constituyendo una barrera para el desarrollo de la gente joven.

A propósito del Día Nacional de la Juventud este 31 de enero, Profamilia recordó que la República Dominicana ocupa el primer lugar en la región del Caribe con la mayor cantidad de uniones tempranas y matrimonios infantiles, según el documento “El matrimonio infantil y las uniones tempranas”.

“Ante esta realidad presente y callada, Profamilia se une a las organizaciones nacionales que abogan por la revisión del Código Civil, para que se aumente la edad mínima para contraer matrimonio o para la unión, especialmente en el caso de las niñas y adolescentes”, indicó.

Nuestro Código Civil, agregó, “contempla, en el artículo 144, que la edad mínima para casarse los hombres es de 18 años, mientras que para las mujeres fija la edad mínima en 15 años, pudiendo ser menos si se cuenta con el permiso del juez o de los padres, y en cuanto se casan o se unen, se consideran emancipadas, es decir, independientes de la tutela familiar. Junto a otras organizaciones, exigimos que se eleve a 18 la edad mínima de las mujeres para el matrimonio o la unión”.

La Resolución de la Asamblea General de la ONU 71/175 de 2016 señala que “el matrimonio infantil, precoz y forzado es una práctica nociva que vulnera Ö los derechos humanos”, y esa misma resolución impulsa a los Estados a promulgar leyes relativas a una edad mínima para contraer matrimonio.