JUSTICIA
Prisión preventiva contra uno de los implicados en asalto Banco Popular
EN EL HECHO UN SEGURIDAD DE LA ENTIDAD RESULTÓ MUERTO
El juez de Atención Permanente del Distrito Nacional dictó un año de prisión preventiva en contra de uno de los acusados en el asalto perpetrado en la sucursal del Banco Popular, ubicada en la avenida Luperón, donde cargaron con RD$1.8 millones.
El magistrado Honorio Suzaña, dispuso que el imputado Delbison Burgos Santana (Cache), cumpla la prisión preventiva en la cárcel de Najayo-Hombres, de San Cristóbal.
El tribunal tomó la decisión tras acoger la solicitud de medida de coerción presentada en contra del imputado por la Fiscalía del Distrito Nacional, que pudo demostrar la vinculación del imputado en el asalto, donde resulto muerto un vigilante.
Según la Fiscalía, en la presentación de la medida de coerción, explica al tribunal que en una casa en Boca Chica se repartieron el dinero robado en partes iguales, tocando cada uno 300 mil pesos. El asalto ocurrió el pasado viernes al mediodía.
Mientras que Caché, con el dinero robado en la sucursal bancaria llegó a comprar una cadena, una medalla y un anillo en la compraventa Melvin, ubicada en Villa Consuelo, por un valor de 49 mil 300 pesos.
Este le entregó a su madre 50 mil pesos y guardó en la casa de su tío Adelaido Santana, 173 mil pesos, dinero que fue entregado a las autoridades inmediatamente se enteraran de que su sobrino estaba siendo perseguido por las autoridades.
Para identificar a Burgos Santana (Caché), como uno de los que participó en el asalto donde resultó muerto en vigilante Sabino Méndez Martínez, fue precisó que la Policía interrogara a algunas de las personas que se encontraban en el interior del banco al momento del asalto.
En la solicitud de medida de coerción, la Fiscalía presentó cuatro pruebas testimoniales en la que figura la señora que le vendió las prendas, Mabel Mercedes Carrasco Mercado, la madre del imputado, Rossy Santana, su tío Adelaido Santana y Mairol Misael Vargas, esta última lo sindica como la persona que tomó el arma del vigilante muerto en el hecho.