Hace un mes Balaguer sufrió un paro cerebral

En una entrevista concedida a LISTÍN DIARIO el galeno, escogido por Balaguer como su médico personal dijo que la biopsia de las úlceras que tenía el líder político dio negativa, por lo que se descartó que fueran cancerosas

Ex presidente Joaquín Balaguer. Imagen de archivo.

Ex presidente Joaquín Balaguer. Imagen de archivo.

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Nexcy D'LeónSanto Domingo, R.D.

El doctor Orestes Guerrero, quien durante 16 años se encargó de la salud del ex presidente Joaquín Balaguer, reveló que hace un mes el estadista sufrió un infarto cerebral que superó sin ser internado y sólo le dejó una leve secuela en la mano y el brazo derechos.

Dijo que el sábado presentó unas décimas de fiebre, lo que hizo reunir al equipo médico que tomó la decisión de cambiarle el antibiótico y pensar en que el domingo le cambiarían el tubo que tenía en el cuello, medida que no se consumó porque Balaguer tuvo un paro cardiorespiratorio sin previo aviso, y aunque se le aplicaron maniobras de resucitación su corazón se detuvo totalmente.

En una entrevista concedida a LISTÍN DIARIO el galeno, escogido por Balaguer como su médico personal en 1986 -después que atendiera a dos de sus hermanas- dijo que la biopsia de las úlceras que tenía el líder político dio negativa, por lo que se descartó que fueran cancerosas.

El doctor Orestes es especialista en medicina interna, cuando Balaguer tenía alguna complicación conformaba un equipo de especialistas de su confianza con quienes trataba al líder político.

¿Cómo empezó el problema de salud que condujo al fallecimiento del doctor Joaquín Balaguer?

El agravamiento actual comenzó con un herpes. El hizo un herpes soster en la frente y ese fue el primer signo de que algo grave estaba pasando.

Esta es una enfermedad que parece sencilla, pero a la edad de él tiene una mortalidad muy alta. Tiene una mortalidad hasta de un 30 por ciento. Esa enfermedad la manejé en la casa. Se recuperó, quedó con cierto dolor residual, se trató solamente con vitaminas y ligeros analgésicos y evolucionó muy bien.

¿No tuvo otros problemas el doctor?

Posteriormente, hace alrededor de un mes, temprano en la mañana, don Aníbal me llamó porque él (Balaguer) no se sentía bien. Cuando yo lo evalué tenía "obnubilación" y no estaba hablando coherentemente. Entonces lo reexaminé y vi los medicamentos que estaba tomando, vi que habia tomando inclusive dosis menores de sus sedantes en la noche y determiné que no era un caso por medicamentos, sino que había hecho un infarto cerebral.

Entonces se trató en la casa, se le puso un medicamento anticoagulante: plabicid, un antiagregante plaquetario, que es la palabra correcta, y en 24 horas se había recuperado en un 90 por ciento.

¿Qué provocó el internamiento?

El jueves llegué a las siete menos cuarto de la mañana, Aníbal me llamó, había hecho una evacuación oscura. Lo examiné y yo mismo llevé la muestra que Aníbal había recogido al laboratorio de Amadita. Esperé los resultados y confirmamos ya definitivamente que era sangre. Llamé al Centro Médico de la UCE, donde una anestesióloga me puso un catéter y me comuniqué con el doctor Fernando Contreras. El doctor Contreras fue a la casa y discutimos el caso y decidimos llevarlo a la clínica Abréu para hacerle una gastroscopia.

Su estado se agravó en la casa y hubo que sacarlo con un poquito más de premura. Se llevó allá donde estaba todo el equipo preparado y recuperó en la clínica prácticamente todas las complicaciones que hizo.

¿Cómo reaccionó a los procedimientos?

El presidente Balaguer llevó su enfermedad con mucha dignidad, ahí están los médicos. No se quejó nunca y soportó estoicamente todas las agresiones a que le, sometimos sin tener una sola queja.

¿Qué impresión tiene de Balaguer?

Era un hombre extraordinario. La primera característica que tenía el ex presidente Joaquín Balaguer como persona, era del hombre fino. Una persona de trato agradable, encantador, familiar, amigo y, sobre todo, una persona de alto concepto de la dignidad, de la amistad y del respeto hacia quienes le rodeábamos. En fin, una persona extraordinaria.

¿Cómo siguió su salud después de regresar de Houston?

Cuando nos fuimos a Houston en la calle, él se veía peor de lo que realmente estaba. Ya cuando nos fuimos, nos fuimos sanos, pero fuimos a un proceso de recuperación, prueba de ello es que en Houston lo único que se le hicieron fueron los estudios y no se le cambió absolutamente nada del tratamiento que llevabamos de aquí. Se aprovechó el viaje para hacer una evaluación general de su estado, el cual era satisfactorio para una persona de su edad. Es tanto así que todos los especialistas que lo vieron se sorprendían de su fortaleza como persona.

¿El doctor decidió hacer esos estudios por razones de salud o porque pensaba postularse?

No, no, no, lo que pasa que a una persona como él, estando en el país se hace difícil su manejo, porque muchos opinan y quieren intervenir de buena fe para tratar de ayudarlos lo mejor posible, entonces, en esa oportunidad, se consideró que lo mejor era sacarlo del ambiente de la República Dominicana para que él se recuperara. Prueba de eso es que cuando salimos de Houston, usted misma estaba ahí; vió que nosotros incluso nos íbamos a dormir todas las noches a nuestras habitaciones, y él se quedó en un proceso de recuperación y después terminamos en la casa de don Guaroa en Miami, donde su recuperación fue total y usted vió como él llegó.