Esta es la historia de la daga de acero valyrio que usa Arya Stark

La última temporada de Juego de Tronos está, al mismo tiempo, desestimando teorías de fans y dando pie a otras nuevas. Y ahí resultan clave objetos que han aparecido a lo largo de la serie, sean incorporaciones recientes o incluso si llevan largo tiempo en la exitosa ficción televisiva de HBO.

((ATENCIÓN: ESTA NOTICIA CONTIENE SPOILERS))

Entre los objetos que se han convertido en más significativos, hay uno que, tras el tercer episodio de la octava temporada, ha resultado fundamental para el destino de sus protagonistas. Este no es otro que el arma que Arya empuña para matar al Rey de la Noche y acabar con sus huestes: la daga de acero valyrio que le entregó Bran.

El arma con la que Arya eliminó de un plumazo a los miles de muertos comandados por el Rey de la Noche, como bien sabrán los seguidores de la ficción, lleva en la serie desde la primera temporada. Esta daga apareció por primera vez como el arma homicida del sicario que intentó asesinar a Bran al inicio de la serie, cuando el joven aún se estaba recuperando de su caída de la torre de Invernalia.

Después de que Jaime Lannister empujara al vacío y dejara paralítico al actual Cuervo de Tres Ojos, Bran Stark se encontraba en reposo cuando intentaron silenciarlo a través de la muerte. Pero gracias a su amantísima madre, Catelyn Stark, que frenó la mortal puñalada con sus propias manos, y a su huargo, Verano, que despedazó al asesino, el joven sobrevivió.

Las intrigas de la daga Valyria

Con el sicario muerto por el lobo huargo y Bran a salvo, los Stark comenzaron a investigar la procedencia del arma, que resultó estar hecha de acero valyrio, un objeto demasiado preciado como para que lo empuñara un hombre cualquiera. Esa fue la primera pista de Catelyn, quien llevó la daga a Desembarco del Rey en busca de culpables.

Allí, Meñique llenó de ponzoña los oídos de Catelyn, afirmando que ese arma fue suya hasta que la perdió en una apuesta con Tyrion Lannister. Así comenzaría la cruzada de la esposa de Ned Stark contra el enano, que fue arrestado, y también de la terrible Guerra de los Cinco Reyes.

Ned Stark se quedó con la daga a la espera de una investigación sobre el intento de asesinato de su hijo, pero la perdió con la traición de Petyr Baelish. El Guardián del Norte terminó, como todos saben, decapitado por orden del rey Joffrey al final de la primera temporada. Meñique conservó el arma hasta que, varias temporadas después, llegó a Invernalia, y se la regaló a Bran, convertido entonces en la memoria del mundo y también conocedor de que fue esa la daga que una vez empuñaron para matarle.

El Cuervo de Tres Ojos, en un movimiento que parecía trivial pero ha resultado fundamental para el devenir de Juego de Tronos, entregó el arma a su hermana Arya en el mismo lugar en el que la Stark acabó con el Rey de la Noche. La excusa de Bran era lógica: ¿para qué quería alguien como él un arma que no podría usar?

Así, la daga valyria llegó a las manos de la letal asesina, que la empuñó para culminar la intriga contra el instigador. Con una artimaña que ni siquiera Meñique vio venir, Sansa y Arya acabaron ajusticiando a Baelish, y la más pequeña de las Stark degolló al sibilino personaje en una de las más épicas escenas de la séptima temporada, para demostrar que "el lobo solitario muere pero la manada sobrevive".

El arma homicida contra el Rey de la Noche

Arya también entrena con la daga junto a Brienne de Tarth, probando la eficacia del ágil movimiento que acabará, más tarde, con el Rey de la Noche. Entretanto, en la Ciudadela, Sam Tarly investiga sobre la Larga Noche, y encuentra un manuscrito en el que se detalla cómo forjar armas con vidriagón. El bonachón cuervo lee un libro en el que aparece un gran dibujo de la daga de acero valyrio.

El escrito que Sam estudia, además de relatar la antigua victoria sobre los Caminantes Blancos, adelantaría que la daga es la clave para que los muertos no reinen sobre Poniente. Pero el destino del arma parece ir más allá: de ser cierta la profecía de Melisandre, la daga pondría fin a la vida de Cersei.

"Ojos marrones. Ojos azules. Ojos verdes. Ojos que cerrarás para siempre", dice la bruja roja a la joven Stark en su primer encuentro. Los ojos marrones corresponden a Walder Frey, y los azules, al Rey de la Noche. Y la despótica reina, aliada con Euron Greyjoy, tiene los ojos verdes. Además, no sería descabellado pensar que fue ella la que mandó asesinar a Bran Stark durante la primera temporada con la misma daga que, paradójicamente, podría acabar con su vida.

¿Será Cersei, que sigue aún en la lista de Arya, la próxima en caer a manos de la asesina? Habrá que esperar al desenlace de Juego de Tronos para ver cuál es el destino final del Trono de Hierro, así como si la daga de acero valyrio ha cumplido su función... o aún tiene cuentas pendientes.