Juego de Tronos justifica la gran oscuridad de la Batalla de Invernalia

El último episodio de Juego de Tronos fue una mezcla de acción, horror y emociones intensas y, aunque consiguió mantener en vilo a los fans, son muchos los que se han quejado de un detalle: la iluminación. La excesiva oscuridad fue duramente criticada en redes sociales, pero el equipo técnico de la serie de HBO tiene una explicación.

El director de fotografía Robert McLachlan contó en una entrevista a INSIDER en 2017 algunos detalles sobre la iluminación de la serie. "Si vuelves a ver la primera temporada, hay mucha luz de fondo sin motivo. Incluso en exteriores de día, puedes ver que hay luz. Los directores de fotografía que lo han estado haciendo desde entonces, creo que todos estamos muy en la misma página en la que intentamos ser lo más naturalistas posible", explicó.

"Para hacer que estos conjuntos y ubicaciones sientan como si no tuvieran luces puestas por nosotros, sino solo por la Madre Naturaleza o algunas velas, para que se sienta más natural, aunque mejorado en algunos casos", añadió.

El equipo creativo de Juego de tronos se ha esforzado durante las últimas temporadas por capturar una sensación de luz natural, algo que también buscaba el director del episodio, Miguel Sapochnik, cuando eligió a Fabian Wagner como director de fotografía para el episodio 8x03.

Wagner contó a Vanity Fair antes de que se emitiera la Batalla de Invernalia y adelantó que "quería evolucionar la narración de la iluminación a la vez que la narración de los personajes".

El episodio establece la metáfora de la oscuridad desde el inicio, cuando una legión de Dothraki con sus espadas encendidas carga contra las filas de los Caminantes Blancos. La secuencia se muestra en el plano general, cuando el haz de luz se mueve a través del campo de batalla hasta apagarse por completo. Esa ola de oscuridad, literal y metafórica, se extiende sobre Invernalia.