La estafa de la energía eléctrica

Desde noviembre del año pasado nos han subido la energía eléctrica 4 veces. Como si nada.

Y para los que privan en técnicos quiero ser más certera: nos han subido la factura y la tarifa eléctrica, que a veces las confundimos pero que no son la misma cosa.

Todo este asunto viene del llamado Pacto Eléctrico, que por años no se firmó y que Abinader agilizó a comienzos del 2021.

Con ese pacto se busca quitar el subsidio que el gobierno pone cada mes y obligar a que la gente pague más. El problema es que hay mucha gente que sigue sin pagar y nos la quieren poner a los que sí pagamos. Pero esa es otra discusión.

La subida en los precios de la luz iba a ser de forma paulatina, despacito, hasta 2026, pero en la desesperación del gobierno por tener más dinero, nos estafaron. Casi como si fuera un atraco.

Pues para estos días el aumento iba a ser dizque de un 9 % pero mentira. A muchos de nosotros nos duplicaron la factura. Todo el que pagaba 500 o 600 pasó de un plumazo a 1,200. Pero ni que el dinero nos lo estemos encontrando en los contenes, como en el Nueva York de los años 80.

A todo esto el presidente salió y dijo que se detendrían los aumentos futuros, creyendo que con eso la gente le iba a aplaudir. El problema inmediato era el aumento que ya nos costaba en el bolsillo.

Ante la queja generalizada entonces el gobierno vuelve a dar hacia atrás y anuncia que devolverán el dinero que ya habían cobrado.

¿Usted necesita alguna otra muestra para entender que nos estaban estafando atento a que somos buenas personas?

Si necesita otra prueba más aquí la tiene: los funcionarios de la Superintendencia de Electricidad registraron aumentos salariales importantísimos desde el año pasado, coincidiendo con los anuncios de que nos subirían el precio de la energía.

Miren, yo estoy a favor de que la gente gane bien. Pero caramba… hay momentos y funcionarios que no lo permiten.

Mire usted al señor Rafael Aníbal Velazco Espaillat, el flamante superintendente de Electricidad, que pasó de un salario de 596,546 pesos a RD$ 653,219. Y ahora, estos días, ya anda por 751,201.

Tuvo un aumento salarial de 154,655 pesos en 11 meses. También les subieron a los miembros del Consejo, con subidas de 115,733 pesos.

Esos miembros pasaron de 446,412 a 488,822 y luego a 562,145 pesos.

Yo estoy seguro que dirán que eso era transparentando los beneficios que tenían, que eso no cuenta como aumento salarial. Algún camino de esos extraños encontrarán para tratar de explicarnos la subida, o la transparentación, en caso de que esa palabra exista.

Mientras llega esa explicación yo sigo sin entender cómo alguien puede ganar más de 700 mil pesos en el sector público, en un país pobre como este. Porque eso es lo que nos dicen, que somos pobres. Pero parece que solo es para algunas cosas.

Por ejemplo esos funcionarios que ganan más de medio millón al mes terminan recibiendo más dinero que su jefe, el presidente de la República.

Quizá ustedes lo conozcan, pero yo no: En ningún lugar del mundo los subalternos ganan más que los jefes. Regla básica de pago y contratación.

Mientras tanto ya el gobierno ha intentado 2 veces una reforma fiscal, eso es subirnos los impuestos. Tomaron el camino de las gasolinas y demás combustibles hasta que la gente puso el grito altísimo.

En estos días les dio para los servicios digitales y también con la energía eléctrica. Una sola duda: ¿qué será lo siguiente, a las quejas en redes sociales?

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