Jean Alain, apresado por la Medusa
De los creadores de Operación AntiPulpo, Operación Coral, Operación Caracol y Operación 13, llega ahora… Operación Medusa.
De las que dan corriente, como en Bob Esponja.
Señoras y señores… Jean Alain Rodríguez está preso.
Después de todo el alboroto con el viaje frustrado, de un fin de semana intenso lleno de especulaciones, y una noche del lunes de película, el hombre fue detenido.
Todo comenzó para nuestros ojos la noche del lunes cuando la Procuraduría dispuso 38 allanamientos, a 18 personas.
Una investigación finísima, dicen los fiscales. De meses largos de investigaciones, interrogatorios y búsquedas bajo el nombre de la llamada Operación Medusa.
Pero con toda la fuerza de la Procuraduría y sus allanamientos un lunes por la noche, el hombre no aparecía.
Y esto es curioso porque estamos hablando de la institución más importante en materia de investigaciones, con todos los recursos del mundo, y un solo ser humano se les escapa, o se les esconde… Se les esfuma.
Y se dedica a tuitear. En la madrugada. Y luego en la mañana.
Con Jean Alain preso la lucha contra supuestos actos de corrupción toma otro rumbo, uno que hasta ahora no conocíamos en el país.
Hablamos de un hombre que fue procurador general de la República, por 4 años. Y que ahora enfrenta acusaciones de Estafa al Estado, falsificación de documentos públicos, asociación de malhechores, soborno, coalición de funcionarios, robo de identidad, lavado de activos y delitos electrónicos.
Dicho lo anterior, sirve darle una mirada a la base de la acusación en su contra, y de su grupo.
La principal acusación en su contra es haber usado la construcción de nuevas cárceles para su enriquecimiento.
Los fiscales que le han investigado dicen que el grupo de Jean Alain se dividió las áreas de construcción o de servicios para sacarle dinero. A uno le tocó la construcción de los pozos sépticos, a otro los uniformes que tendrían los imputados, a otra señora los servicios médicos.
Y el dinero que sacaban, de manera irregular, era supuestamente contabilizado por Rafael Antonio Mercede Marte, que era encargado de Contabilidad de la Procuraduría. A él se le señala como el responsable de “calcular y recoger cantidades en efectivo”.
Otra persona clave en este proceso es Mercede Marte, quien está apresado, y a quien supuestamente le entregaban el dinero en bultos. Millones de pesos. Luego ese dinero era entregado a otro imputado, al señor Jonnathan Rodríguez Imbert.
Otra de las acusaciones es que Jean Alain era jefe de algo llamado “Movimiento Político Renovación”, que lo dejó en el año 2016, cuando llegó a la Procuraduría.
A su llegada el movimiento habría pasado a manos de Rafael Stefano Canó, quien también es uno de los implicados en el caso.
Los fiscales dicen que durante la campaña política del año 2020, cuando Gonzalo era candidato, dirigentes del movimiento fueron nombrados como “enlaces comunitarios”, y en realidad eran activistas para hacer política.
Lo más grave de esto es que, supuestamente, esta gente usaba los vehículos incautados por la Procuraduría para hacer campaña política.
Ese trabajo político que hacían era coordinado por un departamento de la Procuraduría, llamado “Coordinación Institucional”.
Por este caso hasta el momento se ha mencionado a Jean Alain Rodríguez como cabeza del grupo y Rafael Canó, Jonathan Rodríguez, Miguel José de Moya, Rafael Antonio Mercede Marte, Altagracia Guillén Calzado y Javier Alejandro Forteza como parte del supuesto entramado de corrupción.
Otra de las acusaciones es que en la gestión de Jean Alain se borraron documentos importantes de la institución, cosa que Rodríguez niega, alegando que se trató de un hackeo a los sistemas de la institución.
Dijo también que toda la documentación que esa vez se perdió fue recuperada y que no se trataba de información sensible.
Rodríguez dijo que estaba ansioso por comenzar el proceso, que se sabrán muchas cosas y se hablará de corrupción de lado y lado.
Ciertamente desde la noche del lunes hemos visto otro Jean Alain. Dispuesto a todo.
Pero bueno, en medio de tantas acusaciones y señalamientos de manejo de dinero fraudulento, y acusaciones de acoso y persecución, al menos esto ha dejado algo positivo.
Jean Alain por fin ha admitido su error en la entrevista a Miriam Germán Brito en el año 2019, en el Consejo de la Magistratura. Dijo que toda la sociedad había repudiado su actuación y que él, de tener la oportunidad, lo haría diferente.
No que no lo haría, sino que lo haría diferente…
Ahora vamos a la medida de coerción. Que deberá comenzar el jueves próximo, o quizá el viernes. En realidad eso es asunto del fin de semana.
Algo bueno, Jean Alain pidió que la coerción sea pública, que toda la prensa la pueda ver. A los ojos del mundo.
Y así lo esperamos.