El “cambio” del PLD

El PLD nos prometió renovación, caras nuevas, nuevos liderazgos… Prometió entender las razones por las que fueron sacados del poder hace 7 meses, reconectarse con la sociedad y volver a servirle al pueblo. Y nos dio… las mismas caras de antes, los mismos cuestionados de antes, la misma gente que tenemos 20 años viendo en la escena pública. Miren, este era el PLD antes de su congreso interno (una vuelta completa). Y este es el PLD de ahora. Igualito de feo. Uno de los mayores problemas del PLD ha sido su incapacidad, a través de los años, para renovarse completamente. El grupo de dirigentes que está en las direcciones más importantes del partido se ha negado a ceder espacios y a permitir el ingreso de gente nueva, con otras visiones de la sociedad. Para agregar un par de jóvenes a sus filas han optado por una estrategia poco efectiva: ampliaron la nómina de su comité central: de 450 hasta 1,245 miembros y subieron los integrantes del comité político, de 35 a 45 miembros. En eso es que ellos son buenos, en aumentar las nóminas. La famosa “renovación” del PLD tiene un problema de origen: Esta gente vienen de tener todo el poder del país. De sacar 2.3 millones de votos en el año 2016, terminó sacando 1.3 millones en el 2020. En cualquier país del mundo que un partido sufra una debacle electoral como esa toda su dirigencia hubiese renunciado, como mucho, al otro día. Pero no… se ratificaron en sus puestos, como si fuese un premio “por su buen trabajo”. Y al primero que premiaron fue a Danilo Medina, el mismo que cuando se dividió el partido se dio en el pecho y dijo que él ganaba las elecciones. Y no, las perdió. Y por mucho. Danilo podrá tener todos los méritos partidarios que ellos quieran pero ahora mismo hay dos hermanos suyos, de padre y madre, presos acusados de corrupción y de beneficiarse en sus gobiernos. Al menos dos cuñados suyos están siendo investigados por supuesta corrupción en el sector eléctrico. Que en cualquier momento… Lo curioso es que lo eligieron por aclamación, a unanimidad. ¿Y después de todo lo que ha pasado en ese partido nadie se atreve a decirle que no? Cuando se mira al PLD en detalle uno encuentra que eso de perder y aun así resultar premiados es una constante. Es algo así como la promoción de un grupo de perdedores. Hace 8 meses el PLD presentó un grupo de candidatos a puestos electivos ante la sociedad y recibieron una señora pela de votos que eso dio pena. Y de la nada, de repente, vienen y salen electos internamente al Comité Político. Pero señores… Charlie Mariotti era senador en Monte Plata y un hombre con sombrero y que casi no habla le dio una pela de 17 puntos porcentuales. Ah, pero ellos eligieron a Charlie secretario general. Gonzalo Castillo, un tipo tan bárbaro que su mayor problema no es que no pueda tener una idea propia, sino que no pueda ni siquiera hacer suya la de sus asesores. Julio César Valentín viene de recibir la pela de votos más grande que se recuerde en tiempos modernos. Perdió de 38 puntos porcentuales. Eso es como que el Licey le gane a las Águilas 20 a 0. Ay, perdón, perdón… Nada que a Valentín ellos lo eligieron, muy orgullosos, miembro del Comité Político. Cristina Lizardo perdió por 18 % y… ¡tarannn! Premiada como la mujer más votada del PLD. Domingo Contreras perdió de Carolina Mejía la Alcaldía de la capital. Ahora, el comité político es completo: hasta un rapero tiene. Nos imaginamos que cuando estén aburridos, Rafael Paz se pondrá a improvisar. Otro que perdió y de a mucho. Parecería que un requisito para entrar al Comité Político era haber perdido las elecciones pasadas. Pero también está otro grupo, el de los investigados por sobornos y corrupción: Simón Lizardo tiene un expediente abierto en la Procuraduría por asociación de malhechores, coalición de funcionarios, desfalco, estafa contra el Estado, falsedad en documentos públicos y lavado de activos provenientes de delitos de corrupción administrativa. Tommy Galán, este cuento se cuenta solo. O sea, este tipo está acusado en un tribunal de haber recibido sobornos de Odebrecht y el PLD lo promueve a su máximo organismo. Lo más ridículo es que quien le armó el expediente era otro miembro del Comité Central, Jean Alain Rodríguez, que también quería ser parte del organismo y no lo eligieron. Radhamés Segura, preso por Odebrecht, en el mismo expediente de Jean Alain Rodríguez. Temistocles Montás… preso por los sobornos de Odebrecht y por Jean Alain. Luego están Margarita Cedeño, la esposa del “profeshor". Andrés Navarro, que los danilistas lo auparon para que dejara Educación y luego le sacaron la alfombra. Ahora también le susurraron que lo apoyarían a la secretaría general y zas… volvió a perder. Domínguez Brito, el que quemó la gorra del partido. Abel Martínez, el cazador de haitianos de Santiago. Víctor Suarez, el más guapo de todos. Le dijo dictador a Danilo, renunció al PLD. Al final lo llamaron, lo sentaron y se quedó en su partidito. Ahora lo premiaron. Radhames Camacho, el hombre del Estadio Quisqueya. José Ramón Peralta. Por cierto… hace mucho que no tira una encuesta el hombre. Rubén Bichara, el hombre que junto a Danilo negoció y armó las plantas Punta Catalina. Margarita Pimentel, ¿y esa quién es? Quedaron fuera Eduardo Selman, el que era de Cultura que quería traer una vitrina de Italia en plena transición y Robert de la Cruz, asistente de Danilo Medina. El cambio del PLD es igualito al cambio que prometió el PRM. Nada de nada.

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