Marileidy Paulino, con inesperado némesis: Kazcmarek quiere el trono mundial

Avisos de guerra mundial. Marileidy Paulino navegaba viento en popa, hasta que su proa se rompió con la aparición de un enemigo inesperado: Natalia Kazcmarek, la polaca que lo quiere todo en el Mundial de Budapest, cita agustiniana a celebrarse del 19 al 27.

La campeona mundial mixta y medallista esmeralda en las Olimpíadas de Tokio y Mundial de Oregón tendrá este mes la mayor prueba de su carrera, cuando ponga en juego su liderato como la mejor clasificada del planeta en los 400 metros lisos, sabiendo que deberá pisar con un cohete para evitar el descalabro.

Hasta hace sólo algunas semanas, parecía de trámite el porvenir inmediato de la nativa de Nizao, pero Kazcmarek súbitamente ha surgido como la intrusa impertérrita, luego que ganara ante Paulino en Silesia (Polonia) y llevarse por igual la pata de Mónaco en la alcurnia del atletismo rentado.

La ausencia de la campeona mundial, Shaunae Miller-Uibo, hacía pensar que la Bala dominicana no tendría demasiadas exigencias en pos del título, con más de un año (unas 58 semanas) en el trono puntuable, que cataloga al mejor atleta en cada especialidad.

Sin embargo, Paulino sabe que no sólo su verdugo anterior la acosa: también deberá mirar con la rabiza del ojo, principalmente a rivales como Lieke Klaver (escolta de Natalia en Silesia), Femke Bol (tercera del mundo) Sada Williams (4° mundial), Shamier Little, Candice McLeod y Sidney MacLaughlin, otro cohete a punto de explosionar.

Retomar terreno

Marileidy, quien venía de sus mejores momentos históricos hace poco más de dos meses (récord personal y del año planetario), trastabilló en la prueba polaca, con un espantoso tercer puesto (50.00) y contra rivales de menor jerarquía.

Ahora Kazcmarek (1,393 puntos) acosa a Paulino (1,422), quien perdió en menos de semana 63 unidades en el ranking, tiene serias pretensiones de dos zarpazos en uno.

La polaca buscará ganar el Mundial “de Marileidy”, y concomitantemente el gran aderezo de la punta ecuménica, para lo cual, eso sí, aquélla tendrá que librar una gran porfía, porque sus estándares nunca fueron sinópticos a los de su objetivo de turno.

Paulino, si bien ahora presionada intempestivamente, las tendrá aún menos difíciles que su nuevo némesis, por cuanto sólo necesitará retomar los números acostumbrados. Desde que saltó al foco mundial, la quisqueyana siempre había superado a la centro-europea, incluso hasta por un segundo o más (dos veces este año).

Pero faltaría ver si la Kazcmarek, muy inflada por el momentum, no incrementa sus recientes registros diamantinos (Doha, 51.64 y París, 50.10), contra una Marileidy que este curso detuvo el cronómetro en 48.98 (GP Los Ángeles) y DL 49.12 (París). La polaca (3 triunfos de 5 citas en DL), en la racha se ha mantenido por debajo de 50.00.

Paulino, quien está llamada a reventar motores de todo rival que no sea la Uibo, ahora no puede fiarse con ninguna tras el impensable traspié, tan solo tres semanas atrás.

A favor de la dominicana, está el que en la derrota hizo gran cierre, como ha sido costumbre, elocuencia de una muy mala salida, que pudo ser aún cataclísmica.