JUEGO PERFECTO
Cuando el tiempo domina el béisbol de Grandes Ligas
El sábado pasado ocurrió en las Mayores un hecho histórico, por primera vez un partido de béisbol fue definido por el tiempo.
Desde épocas inmemoriales estábamos acostumbrados a ver un equipo dejar tendido en el terreno al contrario vía un batazo de largo metraje, un toque, un wild pich, robo de base, balk...pero jamás se había finalizado un juego a causa del reloj de tiempo.
En el partido en cuestión Colorado y Washington estaban empatados 7 a 7 en el noveno. Ryan McMahom en cuenta de 3 y 2 encaraba al cerrador de Washington Kyle Finnegan, quien dejó pasar el tiempo reglamentario provocando que el árbitro principal determinara la infracción, produciendo el primer walk-off vía cuarta dimensión (espacio-tiempo) en la historia de juego.
Finnegan ha sido uno de los mejores relevistas esta temporada, ocupando la segunda plaza del Viejo Circuito con 22 rescates. Amor no quita conocimiento, pues el cerrajero de Washington es el que más veces ha metido la pata este año, dejando vencer el tiempo nueves veces en media temporada y casi duplicando a otros tres lanzadores que lo secundan con cinco faltas cada uno.
Desde hace años quienes dirigen el negocio han tratado por todos los medios de reducir la duración de los encuentros. Es un deporte masivo, diferente al básquet, fútbol, hockey… que no determinan el final por minutos sino por entradas.
Las reglas del tiempo se establecieron en el 2023 y se modificaron tan pronto como en un año.
Originalmente se daban 15 segundos entre lanzamientos con bases limpias y 20 segundos con corredores en circulación. Desde el inicio de la campaña se redujo el tiempo de 20 a 18 segundos.
En el 2023 los juegos promediaron 2 horas y 40 minutos, 22 minutos menos que en el 2022. El tiempo promedio ha sido el más rápido desde la temporada de 1986. Con relación a abril del 2023 este año el reloj bajó un minuto.
En lo que respecta a las estadísticas generales de faltas se ha disminuido de 0.70 por encuentros en el 2023 a 0.32 en 2024. La cantidad de juegos sin el error temporal mejoró del 52 % en el 2023 a 74 % este año de partidos sin violentar las reglas.
Sería interesante que los sabermétricos e innovadores de las estadísticas llevaran los siguientes registros: el lanzador que más tiempo toma entre picheos, el bateador con más strikes y ponches cronometrados, el que lanza más rápido, el de más virajes, el de más balks, el que más hayan expulsado por protestar y sobre todo quien se calzaría los spikes de Kyle Finnegan.